Vicepresidente de Duma condena violación del espacio aéreo de Siria
27/06/2012 14:30
El líder del Partido Liberal Democrático de Rusia (LDPR, por sus siglas en inglés) y vicepresidente de la Duma (Cámara Baja de ese país), Vladímir Zhirinovski, ha condenado este miércoles la violación del espacio aéreo sirio por un avión caza turco.
“Durante los últimos meses, varias potencias de Europa, Estados Unidos y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) han intentado crear tensión en Siria para intervenir militarmente en ese país”, ha declarado Zhirinovski.
“Turquía está implicado en la creación de tensiones contra Siria, y ha enviado intencionalmente su caza al espacio aéreo del país árabe, por lo que el derribo de ese avión militar a manos de la artillería antiaérea siria fue un hecho muy oportuno”, ha añadido.
Además, ha elogiado el poder de la defensa antiaérea de ese país árabe, al tiempo que ha exigido a las autoridades turcas abstenerse de cometer tales acciones que sólo incrementan la tensión.
El pasado 22 de junio, Siria informó que había derribado un avión de combate turco, el Phantom F-4, por haber sobrevolado sus aguas territoriales en el mar Mediterráneo, cerca de la provincia costera de Latakia, sita en el oeste del país árabe.
Tras derribar el Phantom F-4 turco, la Armada siria sostuvo, ese mismo día, que su reacción fue “según las leyes que rigen en tales situaciones”.
Asimismo, un día después, el presidente de Turquía, Abdolá Gul, reconoció que el caza turco derribado el viernes en aguas territoriales sirias, había violado el espacio aéreo, pero denunció que se había tratado de un error y que la parte siria lo había abatido.
De acuerdo con la Organización de la Aviación Civil Internacional (OACI), cada país tiene derecho a derribar un avión extranjero que haya violado su espacio aéreo.
Desde mediados de marzo de 2011, Siria es escenario de disturbios y masacres, orquestados desde el extranjero y, a pesar del cese el fuego acordado en el plan de paz del enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Kofi Annan, la violencia se mantiene a causa de los incesantes ataques de los grupos opositores sirios.
Esta situación se produce mientras el Gobierno del presidente sirio, Bashar al-Asad, cumple rigurosamente la iniciativa de Annan con el objetivo de devolver la estabilidad a Siria.
El Gobierno de Damasco responsabiliza, con pruebas fiables, a EE.UU. y a algunos de sus aliados occidentales y regionales de incentivar la violencia, a través del suministro de armamento y el financiamiento de los grupos armados.
ha/ybm/msf
“Durante los últimos meses, varias potencias de Europa, Estados Unidos y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) han intentado crear tensión en Siria para intervenir militarmente en ese país”, ha declarado Zhirinovski.
“Turquía está implicado en la creación de tensiones contra Siria, y ha enviado intencionalmente su caza al espacio aéreo del país árabe, por lo que el derribo de ese avión militar a manos de la artillería antiaérea siria fue un hecho muy oportuno”, ha añadido.
Además, ha elogiado el poder de la defensa antiaérea de ese país árabe, al tiempo que ha exigido a las autoridades turcas abstenerse de cometer tales acciones que sólo incrementan la tensión.
El pasado 22 de junio, Siria informó que había derribado un avión de combate turco, el Phantom F-4, por haber sobrevolado sus aguas territoriales en el mar Mediterráneo, cerca de la provincia costera de Latakia, sita en el oeste del país árabe.
Tras derribar el Phantom F-4 turco, la Armada siria sostuvo, ese mismo día, que su reacción fue “según las leyes que rigen en tales situaciones”.
Asimismo, un día después, el presidente de Turquía, Abdolá Gul, reconoció que el caza turco derribado el viernes en aguas territoriales sirias, había violado el espacio aéreo, pero denunció que se había tratado de un error y que la parte siria lo había abatido.
De acuerdo con la Organización de la Aviación Civil Internacional (OACI), cada país tiene derecho a derribar un avión extranjero que haya violado su espacio aéreo.
Desde mediados de marzo de 2011, Siria es escenario de disturbios y masacres, orquestados desde el extranjero y, a pesar del cese el fuego acordado en el plan de paz del enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Kofi Annan, la violencia se mantiene a causa de los incesantes ataques de los grupos opositores sirios.
Esta situación se produce mientras el Gobierno del presidente sirio, Bashar al-Asad, cumple rigurosamente la iniciativa de Annan con el objetivo de devolver la estabilidad a Siria.
El Gobierno de Damasco responsabiliza, con pruebas fiables, a EE.UU. y a algunos de sus aliados occidentales y regionales de incentivar la violencia, a través del suministro de armamento y el financiamiento de los grupos armados.
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