Parlamento iraní condena masacre de musulmanes en Myanmar
30/10/2012 14:58
La Comisión de Seguridad Nacional y Política Exterior del Parlamento de Irán (Mayles) ha instado a la Comunidad Internacional a que actúe para detener la masacre de los musulmanes en Myanmar (Birmania).
Mediante un comunicado emitido este martes, dicha Comisión ha condenado el asesinato de los musulmanes de Myanmar y ha declarado que los países y las comunidades internacionales deben realizar reuniones urgentes lo más pronto posible para tomar medidas necesarias y de emergencia, a fin de detener estos crímenes.
En su nota, la Comisión ha lamentado las acciones de organizaciones internacionales como el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU) y las organizaciones de Derechos Humanos como el Consejo de DDHH de la ONU respecto al genocidio en Myanmar, y ha declarado que en vez de represalias políticas y difundir informes falsos de DDHH, estas organizaciones deberían ocuparse de los crímenes perpetrados contra los musulmanes de Myanmar y obligar al gobierno de este país a respetar los derechos de los musulmanes.
Según el texto, esta Comisión enviará una delegación a Myanmar con el fin de investigar los ataques antimusulmanes en este país, iniciados en junio de 2012.
La violencia étnica sigue causando estragos en Myanmar. Los últimos datos hablan de 170 muertos desde el estallido del conflicto en junio y de cerca de 26 mil desplazados; tan solo en los últimos diez días, al menos cien musulmanes ha sido asesinados.
Los musulmanes rohingyas -una comunidad de unas 800 mil personas ubicada en el Estado Rakhine (oeste)- no son reconocidos como una minoría. El Gobierno central los considera inmigrantes indocumentados provenientes de Bangladés, pese a llevar en el país varias generaciones y, en consecuencia, carecen de derechos civiles.
Amnistía Internacional (AI) y el Observatorio de Derechos Humanos (HRW, por sus siglas en inglés) han expresado su preocupación por la seguridad de miles de musulmanes en Myanmar, exhortando el pasado sábado al Gobierno birmano a encontrar una salida “inmediata” a este conflicto que está diezmando a la población musulmana rohingya.
mf/aa/
Mediante un comunicado emitido este martes, dicha Comisión ha condenado el asesinato de los musulmanes de Myanmar y ha declarado que los países y las comunidades internacionales deben realizar reuniones urgentes lo más pronto posible para tomar medidas necesarias y de emergencia, a fin de detener estos crímenes.
En su nota, la Comisión ha lamentado las acciones de organizaciones internacionales como el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU) y las organizaciones de Derechos Humanos como el Consejo de DDHH de la ONU respecto al genocidio en Myanmar, y ha declarado que en vez de represalias políticas y difundir informes falsos de DDHH, estas organizaciones deberían ocuparse de los crímenes perpetrados contra los musulmanes de Myanmar y obligar al gobierno de este país a respetar los derechos de los musulmanes.
Según el texto, esta Comisión enviará una delegación a Myanmar con el fin de investigar los ataques antimusulmanes en este país, iniciados en junio de 2012.
La violencia étnica sigue causando estragos en Myanmar. Los últimos datos hablan de 170 muertos desde el estallido del conflicto en junio y de cerca de 26 mil desplazados; tan solo en los últimos diez días, al menos cien musulmanes ha sido asesinados.
Los musulmanes rohingyas -una comunidad de unas 800 mil personas ubicada en el Estado Rakhine (oeste)- no son reconocidos como una minoría. El Gobierno central los considera inmigrantes indocumentados provenientes de Bangladés, pese a llevar en el país varias generaciones y, en consecuencia, carecen de derechos civiles.
Amnistía Internacional (AI) y el Observatorio de Derechos Humanos (HRW, por sus siglas en inglés) han expresado su preocupación por la seguridad de miles de musulmanes en Myanmar, exhortando el pasado sábado al Gobierno birmano a encontrar una salida “inmediata” a este conflicto que está diezmando a la población musulmana rohingya.
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