sábado, 14 de mayo de 2011

Carta a la madre de calderón.





Sra. Carmen Hinojosa Calderón

Presente

No creí prudente decirle estimada, porque no la estimo; tampoco apreciable porque no la aprecio, respetable u honorable no cabe teniendo un hijo como el suyo. En fin no nos detengamos en protocolos, el país tiene prisa como sostuvo uno de los colaboradores de su hijo Felipe.

Como sabe, el país que usted y yo habitamos, ese llamado México, tiene problemas. Nada complicados, como bien podría decir el más pequeño de sus hijos. Son sólo infundios que un grupo de resentidos sociales tienen, contra ese, el segundo presidente panista.

Esos que critican a su retoño, se oponen al desarrollo del país pidiendo salarios justos y respeto a sus derechos laborales. Esos que lo acusan de haberse robado la presidencia cual ladrón de pueblo; pueblo pequeño como la Morelia donde usted creció, ¿Se acuerda? Qué tiempos aquellos no? Se acuerda también de la frase célebre de su querubín, “haiga sido como haiga sido…”

Señora, esos malos mexicanos, que se ve no conocen a su hijo tanto como usted. No saben de la sopa que prefiere comer en aquellos momentos tristes, a ellos sólo les ocupa pedir justicia para los cientos de asesinados, desaparecidos y daños colaterales, ¿Le parece justo? Pedirle justicia a su hijo, como si fuera el sabio como Salomón; justicia… Como si la conocieran.

Doña Carmen, está enterada que hay Diputados federales – esos que nos representan y que no tienen una visión pequeña como la de su hijito- que cuestionan la visión de país que quiere él presentarnos. ¿Sabía también que le fue complicado desde el inicio de su sexenio entrar a la Cámara de Diputados? Y que no ha podido regresar…

Regresar… pero a su casa, esa sería una gran idea y no una ideota como las que luego tienen los colaboradores de su Felipillo, ese que es sangre de su sangre… y ya que hablamos de sangre, ¿Qué piensa usted de la guerra que ha pintado al país de rojo? De esa guerra que el hijazo de su vidaza se empeña en no aceptar, de esa guerra que su Felipe niega una y otra y otra vez aquí, allá y en el extranjero.

¿Sabe que tiene coincidencias con unas mexicanas que marcharon en domingo en el zócalo de la ciudad de México para decir ya basta y pedir paz? ¿Sabe que son madres como usted? Se enteró que le llamaron a su hijo “El presidente de la muerte”.

¿Tiene conocimiento de la gente que no quiere a su hijo y no sólo eso, sino que lo odia. Y no lo odia por asuntos políticos, sino por temas más terrenales; porque gracias a él se quedaron sin empleo; porque gracias a él, perdieron a su hijo; porque gracias a él son huérfanos de padre; porque gracias a él no tienen madre!

Y no tienen madre, porque actúen como los colaboradores de su hijo, sino porque fueron asesinadas, mutiladas, violadas o simplemente desaparecidas por el sólo hecho de vivir en Ciudad Juárez.

¿Sabrá usted doña Carmen que la gasolina sube mes a mes en este país? Y que a pesar de que somos un país petrolero es más barata en Estados Unidos. Sí, el mismo Estados Unidos donde dice su hijo que fue a estudiar una maestría en administración pública. Pero que al parecer no le ha servido de nada.

Señora Hinojosa Calderón, ¿Se acuerda cuando su Felipe tenía 26 años y logró ser asambleísta en el DF? Era 1988, esa elección que aún no termina por transparentarse y que al parecer ilustro mucho a su hijo.

Dígame, ¿Que sintió cuando Vicente Fox lo invito como Secretario de Energía? De verdad le vio talla para que contendiera por “la gran” Y cuando digo la grande me refiero a la silla presidencial y no a otra cosa doña Carmen, no sea mal pensada, ya vi que se sonrojo.

Doña Carmen, recuerda usted que su hijo se erigió como “el presidente del empleo” y no ha cumplido la con su discurso, claro, hubo quienes no le creímos, pero me apena por algunos de sus paisanos que votaron por el creyendo en ese discurso y ahora lamentablemente han tenido que cruzar la frontera para irse como indocumentados a estados unidos a conseguir empleo.

Oiga ¿De quién fue la idea de sostener en 2006, que el otro candidato presidencial era “un peligro para México”? no fue suya verdad doña Carmen? Se lo pregunto porque hoy por hoy, los mexicanos que no pensamos como su hijo, que somos muchos, creíamos y creemos que el verdadero peligro era y es su hijo.

¿Sabe que un sector del país se organizó el día de ayer, para por twitter y facebook “mentarle la madre” a su hijo? Que feos no…? Atreverse a tanto por unos cuantos muertos, 40 mil nada más, por unos miles de despedidos, por unos cientos de empresas que cerraron este año; por unos miles de estudiantes que no pudieron accesar a la educación universitaria. Por unos cuantos niños que murieron quemados en una guardería que dicho sea de paso les costaba poco; por unos cuantos mineros que han muerto, por unas cuantas familias que se han enriquecido bajo el gobierno de su hijo… su Felipe.

Señora… donde perdió la mano firme que debió haber tenido con Felipillo? Porque permitió que se volviera un mentiroso, que se endeudará con malas amistades; que conviviera con gente que no debía. Señora… porque no hizo nada para formar como hombre de bien a su Felipe… Porque siendo de Michoacán no aprovecho para llevarlo con don Marcial Maciel. Porque señora permitió que su hijo autorizara que el exsecreatario Agustín Carstens pudiera gastar en dos días 6 mil pesos para comida en la oficina, si su actual secretario Ernesto Cordero dice que eso debe alcanzarnos para un mes.

Doña Carmen, la verdad… creo que usted es responsable directa del que hoy algunos reconocen como presidente, de su manejo, de su formación, de sus irresponsabilidades, de sus omisiones, del desprecio por los que pensamos diferente, de la forma en como atacar a sus adversarios, de su concupiscente manera de beber- según dicen algunos. Sí señora, usted es responsable de ello.

Por ello, no se queje ni se moleste por los mexicanos que libremente reciben con música de viento a su hijo, en los recorridos que hace por las latitudes mexicanas, no se incomode, ni se encorajine por las menciones y recordatorios recibidos el día de ayer, usted también es responsable.

Doña Carmen Hinojosa Calderón, la dejo, voy a ver cómo sigue el país, espero no sea necesario que vuelva a escribirle para comentarle que México está peor. Por el bien de todos espero que no.

Samuel Hernández Apodaca
Académico, especialista en temas de Derecho Público e iusfilosofía, miembro de la Red de Investigadores Parlamentarios.