ONU: Colonizaciones israelíes, golpe fatal contra la paz
02/12/2012 21:59
El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, criticó enérgicamente el anuncio del régimen de Israel sobre la construcción de nuevas viviendas en los territorios ocupados palestinos y tildó esta decisión de un "golpe fatal" para el proceso de la paz.
El titular de la ONU, en su comunicado, publicado el domingo, tras recordar que las colonizaciones israelíes son ilegales de acuerdo con el derecho internacional, adelantó que si se concreta esa iniciativa, "daría un golpe fatal a las últimas oportunidades de garantizar una solución" entre ambas partes del conflicto.
El régimen de Tel Aviv anunció el viernes su decisión de construir otras 3.000 viviendas en Al-Quds (Jerusalén Este) y en Cisjordania, en represalia por el mejoramiento del estatus de Palestina, aprobado el jueves en la Asamblea General de la ONU.
Ban Ki-moon expresó asimismo una gran inquietud y una profunda decepción por la nueva medida israelí que "amenaza con cortar totalmente a Jerusalén Este del resto de Cisjordania".
Además de instar a que se eviten acciones provocadoras, el máximo responsable de la ONU concluyó que el régimen israelí debe "renunciar a su proyecto".
Entre tanto, la medida del régimen de Israel ha provocado críticas de la comunidad internacional, como de la Unión Europea (UE), el Reino Unido y Estados Unidos.
Pese al rechazo internacional, más de medio millón de israelíes viven en asentamientos ilegales construidos desde que ocuparon en 1967 los territorios palestinos de Cisjordania y Al-Quds.
El ex primer ministro del régimen israelí Ehud Olmert también se ha mostrado muy crítico ante la iniciativa de levantar miles de viviendas para colonos israelíes en los territorios ocupados palestinos y ha señalado que estas medidas forman parte de las políticas inadecuadas del primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu.
El 29 de noviembre (el pasado jueves), la Asamblea General de las Naciones Unidas votó, pese a la fuerte oposición del régimen de Tel Aviv y Washington, a favor de la elevación de estatus de Palestina a Estado observador no miembro.
Gracias a ese reconocimiento, el pueblo palestino tiene acceso a las agencias de la ONU y a la Corte Penal Internacional, donde puede presentar quejas contra el régimen de Israel.
nas/nl/msf
El titular de la ONU, en su comunicado, publicado el domingo, tras recordar que las colonizaciones israelíes son ilegales de acuerdo con el derecho internacional, adelantó que si se concreta esa iniciativa, "daría un golpe fatal a las últimas oportunidades de garantizar una solución" entre ambas partes del conflicto.
El régimen de Tel Aviv anunció el viernes su decisión de construir otras 3.000 viviendas en Al-Quds (Jerusalén Este) y en Cisjordania, en represalia por el mejoramiento del estatus de Palestina, aprobado el jueves en la Asamblea General de la ONU.
Ban Ki-moon expresó asimismo una gran inquietud y una profunda decepción por la nueva medida israelí que "amenaza con cortar totalmente a Jerusalén Este del resto de Cisjordania".
Además de instar a que se eviten acciones provocadoras, el máximo responsable de la ONU concluyó que el régimen israelí debe "renunciar a su proyecto".
Entre tanto, la medida del régimen de Israel ha provocado críticas de la comunidad internacional, como de la Unión Europea (UE), el Reino Unido y Estados Unidos.
Pese al rechazo internacional, más de medio millón de israelíes viven en asentamientos ilegales construidos desde que ocuparon en 1967 los territorios palestinos de Cisjordania y Al-Quds.
El ex primer ministro del régimen israelí Ehud Olmert también se ha mostrado muy crítico ante la iniciativa de levantar miles de viviendas para colonos israelíes en los territorios ocupados palestinos y ha señalado que estas medidas forman parte de las políticas inadecuadas del primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu.
El 29 de noviembre (el pasado jueves), la Asamblea General de las Naciones Unidas votó, pese a la fuerte oposición del régimen de Tel Aviv y Washington, a favor de la elevación de estatus de Palestina a Estado observador no miembro.
Gracias a ese reconocimiento, el pueblo palestino tiene acceso a las agencias de la ONU y a la Corte Penal Internacional, donde puede presentar quejas contra el régimen de Israel.
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