Brasil muestra en Cuba las huellas del gobierno militar
Escrito por Xinhua
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El día que duró 21 años, de Camilo Tavares
El proyecto cinematográfico «Marcas de la memoria», que recoge las huellas del gobierno militar en Brasil, comenzó a exhibirse en Cuba con la proyección de nueve documentales.
Los documentales conforman el programa de presentaciones en la isla del proyecto, que ocupa desde el viernes espacios en el habanero Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA), así como en el céntrico recinto ferial Pabellón Cuba y el Multicine Infanta.
«En los momentos más difíciles Cuba nos acogió y ayudó a sobrellevar el trauma de aquellos años», destacó el productor y coordinador de la muestra, Diego Souza, quien vivió exiliado en La Habana con su familia cuando apenas contaba con tres años de edad.
«Es necesario contar las historias registradas en estos documentales. Ustedes deben saber que tras el reciente triunfo de la presidenta Dilma Rousseff, hubo entre los sectores derrotados quienes dejaron entrever el deseo de que regresaran los militares. El cine puede contribuir a recordar qué fue la dictadura y por qué no debe volver», subrayó.
Por su parte, el realizador Silvio Tender consideró que «el cine brasileño siempre tuvo una vocación de resistencia que comenzó mucho antes de que surgieran filmes como los que traemos a La Habana».
Tender evocó los tiempos en que el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC) colaboró con cineastas prohibidos por el régimen militar brasileño, como Glauber Rocha.
Militares en democracia, de Tender, abrirá mañana domingo el ciclo en el Multicine Infanta, mientras que otra de sus películas, Abogados contra la dictadura, se proyectará el próximo viernes.
El ciclo, que se extenderá hasta el próximo 29 de noviembre, incluye además Yo recuerdo, de Luiz Fernando Lobo; 500: los bebés secuestrados por la dictadura, de Alexandre Valenti; y Dos historias y Nuestras historias, de Ángela Zoé.
También se exhibirán Los 70, de Emilia Silveira; El día que duró 21 años, de Camilo Tavares; y Repare bien, de la portuguesa María de Medeiros en colaboración con Ana Petta.
A Cuba viajó la persona que aportó con sus testimonios a Repare bien, Denise Crispim, excompañera del militante Eduardo Leite, «Bacurí», torturado y asesinado por el régimen militar y quien vivió en carne propia una cruel historia de persecución política.
Además, está en La Habana la coordinadora del capítulo brasileño de la red En Defensa de la Humanidad, Marilia Guimaraes, quien luchó contra el régimen militar y tuvo que exiliarse en La Habana.
«Marcas de la memoria» también donará al Instituto Cubano del Libro 23 libros y revistas, publicaciones realizadas por el proyecto.
Este sábado el diario Juventud Rebelde afirmó que «la iniciativa del hermano país del Cono Sur escogió a Cuba como una forma de agradecer la solidaridad y afianzar los lazos de amistad que han unido a ambas naciones».
El gobierno militar se instauró en Brasil el 1 de abril de 1964 y se extendió hasta el 15 de marzo de 1985, con un largo récord de violaciones de los derechos humanos.
En abril último, el gobierno de Rousseff, el Congreso y los movimientos de derechos humanos se unieron para defender el rescate de la memoria de los crímenes de ese período.
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