¿Por cuál apostará EEUU: Ucrania, Oriente Medio o China?
Escrito por: Kurt Kolbert
Los funcionarios de Washington han anunciado recientemente que Estados Unidos va a aumentar su presencia militar en Irak, al mismo tiempo, los soldados estadounidenses han sido desplegados en Kurdistán iraquí. Además, la Casa Blanca está intentado aumentar la presión sobre Irán en los diálogos en transcurso sobre el programa nuclear del país persa para hacer que este reduzca el apoyo que ha estado proporcionando a Damasco. Por otro lado, Washington se niega a disminuir la tensión en torno a la situación en el este de Ucrania, alegando que Rusia ha estado enviando equipos militares y tropas allí.
Los países europeos, por su parte, se encuentran en una situación parecida a la de Irán, ya que el país norteamericano los ha puesto bajo presión para obligarlos a adoptar un nuevo paquete de sanciones contra Rusia. Por lo tanto, no es ninguna coincidencia que Rusia y China últimamente se han dado unos pasos para acercarse más y han unido sus esfuerzos en los ámbitos de la energía y la cooperación económica. Aquí surge la pregunta sobre el objetivo final de la política exterior de EE.UU.: ¿Ucrania, Oriente Medio o China? los miembros del tanque de pensamiento de Washington tienen que responder a esta pregunta, y aunque uno podría recibir como respuesta que la administración de Obama puede manejar una serie de diferentes cuestiones simultáneamente, en el caso de que persista, el resultado de su investigación puede llegar a ser bastante peculiar.
Hoy, existe una creencia general en Washington de que entre las dos últimas crisis - la de Oriente Medio y la de Ucrania - la primera es mucho más importante para los intereses norteamericanos que la segunda. Hay una serie de indicadores que afirman esta opinión. Primero, el Oriente Medio está siendo azotado por una guerra a gran escala, especialmente en Irak y Siria, y Estados Unidos lleva a cabo ataques aéreos a diario contra las positions de terroristas de EIIL en estos dos países. En segundo lugar, la doctrina de seguridad nacional de Estados Unidos implica la protección de la población estadounidense dentro y fuera del país y los terroristas de EIIL constan, con mucha diferencia, una amenaza urgente para los ciudadanos estadounidenses que Rusia. Finalmente, el tanque de pensamiento de Washington cree que la estructura regional de Oriente Medio está desapareciéndose entre las llamas, y que la región necesitará varias décadas para construir una nueva, mientras que en Europa la estructura ha sido “un poco sacudida” por los acontecimientos en Ucrania.
Por otra parte, los políticos, legisladores y analistas estadounidenses creen que el país norteamericano, mientras se centra en Rusia e impulsa la crisis de Ucrania, no puede prestar suficiente atención a Irak, Siria e Irán. Por lo tanto, las acusaciones lanzadas contra la administración de Obama, están basadas en que la obsesión de Washington con Ucrania permitió a los terroristas de EIIL hacerse con el control de grandes partes de Irak y Siria.
Sin embargo, a los que están preocupados por las acciones de Vladimir Putin y creen que esté podría tener intención de extender la influencia de Rusia en la región postsoviética, el Oriente Medio parece más bien una distracción peligrosa. Los partidarios de este enfoque temen la posibilidad de que los Estados Unidos vuelva a mezclarse en la “guerra contra el terror” en Medio Oriente, mientras que según ellos, la principal amenaza a la seguridad de los intereses de EE.UU. está creciendo en Europa.
Esta posición se basa en la premisa de que EE.UU. no ha entendido del todo la gravedad de los retos con los que se enfrentará con el fortalecimiento de Rusia. Los partidarios de este enfoque, están seguros de que la reunificación de Crimea a Rusia es sólo el principio de una redistribución del poder en el mundo que costará caro a los Estados Unidos. Por otra parte, están convencidos de que Rusia se convertirá en una amenaza para el resto de Ucrania, e incluso para otros Estados bálticos.
Este grupo sostiene que el hecho de que Washington rechaza la posibilidad de la participación militar directa en la crisis de Ucrania, hace que la crisis parezca menos seria de la que podría ser mientras de hecho, es parte de un nuevo rompecabezas llamado “la creación de un nuevo orden mundial”. El peor guión que ha sido discutido a puertas cerradas en la Casa Blanca, es la supuesta posibilidad de que Moscú ponga sus armas nucleares en marcha en el caso de un enfrentamiento real. Esto, por supuesto, sería la mayor crisis en el ámbito de la seguridad internacional desde la crisis de los misiles en Cuba, y sería mucho más grave y peligroso de la siguiente fase de la guerra en Irak que ha estado implicado en alguna que otra guerra durante estos últimos 35 años
Naturalmente, la gran mayoría de los políticos y los expertos razonables y sensatos en los EE.UU. no creen en el guión nuclear, aunque muchos de ellos todavía temen que Moscú se inicie un asalto convencional a gran escala a Ucrania o provocar una “rebelión” de la población rusofona en los países bálticos que son miembros de la OTAN. En caso de que Rusia invade los Estados bálticos y la OTAN no puede reaccionar, argumentan ellos, Moscú le mostrará a todo el mundo que la alianza militar occidental es, de hecho, un “tigre de papel”.
Este grupo de la elite política de Estados Unidos, espera que la creciente presión en la economía rusa persuada a Putin a abstenerse de avivar el conflicto ucraniano. Aunque, sus opositores están convencidos de que la crisis económica puede empujar a Rusia a tomar una serie de impredecibles medidas que quepan dentro del guión de "fuerza bruta".
A pesar de ello, Obama fue a la cumbre de la APEC en China. Para los partidarios del 'giro de eje' estadounidense hacia Asia, la creciente influencia de China es el principal desafío a largo plazo. Algunos grupos de pensamiento están convencidos de que, mientras EE.UU. intenta manejar las dos anteriormente mencionadas crisis, China es capaz de establecer su control sobre el este de Asia y la región Asia-Pacífico, que poco a poco, se está convirtiendo en un centro importante de la economía mundial. Estos grupos insisten en que el Gobierno de Obama debe tomar algunas medidas para evitar que China se vuelva cada vez más fuerte en el aspecto militar, político y económico. También sostienen que reciente acercamiento de Rusia a China en busca de un nuevo mercado energético importante, puede hacer más fuerte a este país. Los estadounidenses están cada vez más nerviosos sobre la posibilidad de la formación de una nueva alianza entre China y Rusia en Asia. Y, al parecer, estos grupos de pensamiento están percibiendo bien los procesos que afectan a la formación de un nuevo orden mundial.
El tiempo dirá si la administración de Obama es capaz de determinar las prioridades estratégicas de Estados Unidos, ya que parece que estamos pasando por un momento crucial en el proceso de creación del nuevo orden mundial y es muy probable que sea demasiado tarde para cambiar cosas cuando las apuestas están hechas. Al parecer, el principal desafío de Estados Unidos es actualmente China, no Rusia ni el Oriente Medio. El rápido crecimiento de China, es realmente significativo aunque parece tan lento desde el exterior que uno puede tener la impresión de que no será motivo de un conflicto inmediato entre China y Estados Unidos.
Aunque los Estados de Oriente Medio que están colapsándose y la posible propagación del terrorismo son también temas que necesitan ser tratadas con urgencia. La primera ocupación de Irak y las siguientes acciones de Washington han desatado una cadena de revoluciones de colores que condujeron la región a una situación incontrolable. Los partidarios de los EE.UU. en la región - Riad y Doha- que ayudaron a la Casa Blanca en realizar sus planes, se enfrentan hoy a la amenaza de un inminente colapso debido al creciente poder de los terroristas.
Ahora, es imprescindible para los EE.UU. establecer un balance entre sus relaciones con China, Rusia y Oriente Medio, ya que no lograr este objetivo no sólo puede poner en peligro la paz internacional, sino la propia supervivencia de los Estados Unidos como un superpoder. De lo contrario, Estados Unidos tendrá que conformarse con el papel de un poder regional, sin influencia real en los acontecimientos de Europa y Asia. Parece que este será el guión más probable, ya que las recientes acciones de Barack Obama están demostrando que él, se ha dado cuenta de los errores que ha cometido y ahora está tratando de salir de problemas que él ha creado. Aun así, la verdad es que no tiene idea de cómo debe hacerlo.
ymc
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