Miami: Ciudad de la barbarie
Escrito por Nicanor León Cotayo
Aunque muchos la identifican como del Sol, su realidad cotidiana se aleja de tal ilusión poética.
Este lunes el sitio MiamiDiario desplegó un impresionante titulo que dice: “Pareja fusilada en Miami-Dade”.
Aclara que sucedió el domingo al noroeste de ese territorio en medio de un nuevo tiroteo que estalló en la calle 103 y avenida 11.
Según testigos, las victimas estaban allí entre un grupo de personas disfrutando un juego de fútbol.
De pronto, indicaron esas fuentes, un automóvil frenó y desde su interior empezaron a disparar contra ellos.
Como dijo este lunes el titulo de MiamiDiario, en la práctica “fusilaron” a esa pareja, que fue remitida al Jackson Memorial Hospital.
Una vez más, no hay detenidos y la policía se limitó a explicar que investigan quiénes fueron los autores de la balacera.Pero ni siquiera ha proporcionado una descripción de algún posible sospechoso de causar la tragedia.
¿Cuándo sucedió? El jueves, a solo horas de otro tiroteo en la Universidad Estatal de la Florida que provocó tres alumnos heridos, uno de gravedad.
Este lunes el Nuevo Herald publicó un editorial bajo el siguiente titulo dedicó un editorial a valorar la situación la situación bajo el siguiente un significativo titular:
“Una alarma que no se puede ignorar”, donde afirma, “los estampidos de las armas de fuego vuelven a llenar de pavor al público”.
Menciona el caso de la Universidad Estatal, en la que un individuo irrumpió en una biblioteca y abrió fuego contra los presentes.
Como agresor identificaron a Myron May, un ex alumno, dijo el Herald, “que al parecer tenía problemas mentales”, y quien fue ultimado por la policía.
Casi al mismo tiempo, en el norte de Miami, y también el jueves, dos jóvenes fueron heridos en un tiroteo cerca de una escuela secundaria.
Este lunes el Nuevo Herald publicó un editorial que en una de sus partes dijo:
Dos hechos de sangre con armas de fuego el mismo día no constituyen solo una tragedia, sino una “señal de alarma”.
Y agregó que el deficiente control de la posesión de armas facilita que un criminal cometa una matanzaTenerlas es un derecho constitucional, pero se necesitan mayores controles para evitar que vayan a manos de criminales y personas con trastornos mentales, enfatizó el escrito.
Lo avaló recordando el último tiroteo en la Universidad Estatal de la Florida y las balaceras que “con lamentable frecuencia” tienen lugar en barrios estadounidenses.
Por algo se pone tan en duda llamar a Miami, la Ciudad del Sol, un territorio al que se ajustaría mucho más denominarlo Ciudad de la Barbarie.
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