DIARIO DE LA BIENAL: La idea primero… sin descuidar lo demás (+ FOTOS)
Escrito por
Yuris Nórido / CubaSí
Obra de Dagoberto Rodríguez (detalle).
Factoría Habana acoge una muestra colectiva centrada en el
conceptualismo… una «cartografía» que, en ocasiones, trasciende las
fronteras de eso que llamamos «arte».
Concha Fontenla es una curadora inquieta, y su espacio, Factoría
Habana, acoge siempre exposiciones que van más allá de la pura
estilización: propuestas que pulsan un amplísimo diapasón de temas y
disciplinas. El arte que le interesa a Concha Fontenla tiene que ser más
que «bonito» (a veces ni «bonito» tiene que ser): debe «decir»,
inquietar, instar, estimular…
En esta edición de la Bienal, la galería se inserta en el programa principal con la muestra colectiva «Intersecciones», en la que participan destacados artistas de varias promociones (y puntos de vista) que articulan sus propuestas a partir del arte conceptual.
Este término, «arte conceptual», ha generado muchas polémicas… y ha servido de manto a no pocos advenedizos. Pero los que exponen aquí saben muy bien lo que se traen entre manos: nadie espere una factura descuidada (la idea no se descuida en el estilo), pero es evidente el pollo del arroz con pollo.
Cada una de las piezas plantea una tesis (y puede sugerir algunas más), y el discurso suele ser diáfano, aunque nunca ramplón o simplista.
La curaduría conforma una especie de cartografía de los múltiples caminos del conceptualismo en Cuba, una corriente en diálogo permanente con las tendencias internacionales, pero que se zambulle sin prejuicios (y muchas de las piezas que aquí se exhiben lo demuestran) en el aquí y en el ahora… hasta el punto de que muchos artistas devienen acuciosos cronistas del devenir de la nación.
La «poesía» de la expo parece desbordar las fronteras del arte más convencional para tender lazos a la ciencia, la arquitectura, el diseño… en definitiva, se trata de crear un entramado armónico, imperio de las intersecciones que, al final, marcan la vida contemporánea.
Carlos Gairacoa
Yoan Capote
José A. Toirac
Fernando Rodríguez
Tonel
En esta edición de la Bienal, la galería se inserta en el programa principal con la muestra colectiva «Intersecciones», en la que participan destacados artistas de varias promociones (y puntos de vista) que articulan sus propuestas a partir del arte conceptual.
Este término, «arte conceptual», ha generado muchas polémicas… y ha servido de manto a no pocos advenedizos. Pero los que exponen aquí saben muy bien lo que se traen entre manos: nadie espere una factura descuidada (la idea no se descuida en el estilo), pero es evidente el pollo del arroz con pollo.
Cada una de las piezas plantea una tesis (y puede sugerir algunas más), y el discurso suele ser diáfano, aunque nunca ramplón o simplista.
La curaduría conforma una especie de cartografía de los múltiples caminos del conceptualismo en Cuba, una corriente en diálogo permanente con las tendencias internacionales, pero que se zambulle sin prejuicios (y muchas de las piezas que aquí se exhiben lo demuestran) en el aquí y en el ahora… hasta el punto de que muchos artistas devienen acuciosos cronistas del devenir de la nación.
La «poesía» de la expo parece desbordar las fronteras del arte más convencional para tender lazos a la ciencia, la arquitectura, el diseño… en definitiva, se trata de crear un entramado armónico, imperio de las intersecciones que, al final, marcan la vida contemporánea.
Carlos Gairacoa
Yoan Capote
José A. Toirac
Fernando Rodríguez
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