Vigiló Gutiérrez Barrios a espías cubanos y soviéticos
Lunes 03 de junio de 2002
Cómo se espió a los agentes de Fidel
En los últimos días de septiembre de 1966, el capitán Fernando Gutiérrez Barrios tomó su máquina de escribir y anotó: "Julián López Díaz desempeña el cargo de Tercer Secretario de la Embajada de Cuba en México. Encargado de los asuntos de prensa, extraoficialmente actúa como Oficial del Servicio de Inteligencia de su gobierno. Tiene su domicilio en Rafael Rebollar No. 25, con teléfono 15-71-57".
En el siguiente párrafo, el veracruzano prosiguió: "Este diplomático llegó a México el 12 de diciembre de 1964, acompañado de su esposa Irina Trapote Minue. Nació en Cuba el 19 de junio de 1940 y tiene el Pasaporte Diplomático Cubano D/64/630".
El viejo conocido de los tripulantes del Granma , el "amigo de la Revolución Cubana"; el "capitán caballero", como Fidel Castro Ruz describía a quien ocho años antes lo había dejado en libertad, detallaba a precisión los nombres y cargos diplomáticos de los principales operadores de la inteligencia cubana y del espionaje soviético en México.
En 20 párrafos mecanografiados en cuatro hojas, Gutiérrez Barrios revelaba cómo espiaba a presuntos espías del régimen cubano y a sus pares de la inteligencia soviética, los agentes de la KGB que operaban en México.
En síntesis, daba detalles de las actividades de un selecto grupo de cubanos pertenecientes al primer círculo del comandante Fidel Castro, entre ellos Irina Trapote, una de las amigas más cercanas de la esposa de Raúl Castro y ex esposa del fundador del servicio de inteligencia del movimiento revolucionario de Cuba.
El título del informe lo denominó: "Antecedentes y Actividades de Julián López Díaz". Está fechado el 29 de septiembre de 1966 y fue enviado al entonces secretario de Gobernación, Luis Echeverría Álvarez, con el característico "respetuosamente" que siempre antecedía la rúbrica del capitán, quien era el titular de la Dirección Federal de Seguridad.
Los documentos están acompañados de una serie de fichas informativas. La primera, engrapada a la portada, tiene en el ángulo superior derecho la fecha 30/IX/66 y al centro se lee: "Este informe sintetiza las actividades de Julián López Díaz, miembro de la Embajada Cubana, de acuerdo con la investigación y detención realizada por la Dirección Federal de Seguridad y con los informes del señor S. y del Lic. Cosío".
Los documentos, de los cuales EL UNIVERSAL tiene una copia, revelan detalles, enlaces y la forma como fue detenido el diplomático, quien era parte del Departamento de América, la oficina de inteligencia cubana.
Con la aprehensión hecha por la Federal de Seguridad, la inteligencia cubana quedó exhibida por el gran amigo de Fidel como la instancia articuladora de una operación, financiada presuntamente por la KGB, que servía para enviar armas desde territorio nacional a la guerrilla guatemalteca.
* * * * * *
Julián López Díaz no era cualquier espía. Ni su matrimonio era una unión conyugal tradicional. Su esposa, Irina Trapote Minue, tenía cuatro años cuando en abril de 1942 llegó a México procedente de España en compañía de sus padres Inés Minue Franco y Víctor Trapote Mateo, ambos asilados políticos. La figura de su padre, un ex combatiente de la guerra civil española, no podía ser olvidada por Gutiérrez Barrios. En el verano de 1956 este escultor fue detenido por la DFS como parte del grupo liderado por Fidel Castro. Desde entonces, la policía política mexicana lo tenía registrado en sus fichas como el enlace entre el exilio español y la organización cubana 26 de Julio.
El capitán Gutiérrez Barrios escribió en su reporte a Luis Echeverría: "Víctor Trapote Mateo, padre de Irina, actualmente tiene calidad de inmigrado, la cual le fue concedida por la Secretaría de Gobernación el 8 de abril de 1955. Se sabe que fue teniente coronel en el Servicio de Inteligencia del Ejército soviético, en el cual permaneció 15 años. A la fecha trabaja para el Servicio de Inteligencia cubano.
"En el mes de julio de 1956 fue detenido por esta Dirección al comprobarse sus actividades con el grupo clandestino que actuaba en nuestro país denominado 26 de Julio, dirigido por Fidel Castro Ruz, el que también fue detenido cuando planeaba una conjura contra el gobierno cubano, que en esa época era presidido por Fulgencio Batista. Víctor Trapote servía de enlace de este grupo con los asilados políticos españoles para obtener de éstos ayuda económica y moral. Fue puesto a disposición de las autoridades migratorias de Gobernación y posteriormente se le puso en libertad, previa amonestación."
Irina partió a Cuba al triunfo de la Revolución. Ahí se encontró de nuevo con uno de los amigos de su padre, Ramiro Valdés Menéndez, fundador del sistema de inteligencia cubano, quien también estuvo entre los 12 comandantes que zarparon de Veracruz a bordo del Granma y que desde 1956 quedó fichado por la DFS.
Su itinerario y su primera unión conyugal no pasaron inadvertidos para el jefe de la DFS: "Irina Trapote estuvo casada antes con Ramiro Valdés, Ministro del Interior y Jefe del Servicio Cubano de Inteligencia. Durante el año de 1961 realizó constantes viajes de La Habana a México con Pasaporte Diplomático y con el cargo de secretaria de Relaciones de la Federación de Mujeres Rurales Cubanas, organización femenil de adoctrinamiento en ese país. En el año de 1962 realizó otros viajes, pero ostentando el cargo de Inspectora de consulados, mismo que desempeñó hasta diciembre de 1964, en que llegó nuevamente a México como esposa de López Díaz".
Atadas con una liga y en el mismo expediente de Julián, se encuentran varias tarjetas donde la DFS registró las entradas y salidas de Irina. Con palabras y números en clave se anotó: "Trapote Minue Irina. Cubana de Aviación salió con destino a La Habana, Cuba. Exp. 64-8-63.
"Nov. 21/63.- En el vuelo 464 de Cubana de Aviación llegó a México, D.F. procedente de La Habana, Cuba, con pasaporte diplomático; Inspectora de Consulados; Cubana. El 18 del actual.
"7.Dic./64 Domicilio Embajada de Cuba en México./ El 4 del actual en el vuelo 464 de la Cía. Cubana de Aviación llegó a México, D.F. procedente de La Habana Cuba. Cubana con pasaporte Diplomático, el Hogar, esposa de Julián López Díaz.
"31 Agt. 66. En el vuelo 465 de la Cía. Cubana de Aviación el 13 de Dic. 1965. Salió de México con destino a La Habana con pasaporte ordinario cubana. esposa de López Díaz Julián.
"13 Sept. 1966. En el vuelo 464 de la Cía. Cubana de Aviación llegó a México, D.F. procedente de La Habana el 28 de enero del presente año. Con pasaporte Diplomático. Cubana. Hogar.".
Irina y Julián eran fundadores del grupo conocido como Liberación, que era el sector del espionaje cubano dedicado a América Latina. A finales de la década de los 50, Trapote Minue conoció a Vilma Espina, esposa de Raúl Castro, de quien se convertiría en su gran amiga y confidente. "Desde aquel tiempo comenzó a fungir como pieza operativa de la inteligencia cubana, que comandaba Valdés, y fue una de las fundadoras del Departamento de América, como se le llamó después a la oficina de espionaje", explica Jorge Masetti, un ex agente que desde 1974 y durante 15 años trabajó para el gobierno de la isla.
Masetti, cuyo padre, del mismo nombre, fue íntimo amigo del Che Guevara y fundador de la agencia Prensa Latina , explica vía telefónica desde París, Francia, que Irina se encargó durante varios lustros de las relaciones internacionales del gobierno de la isla con América Latina. "Julián, una vez que abandonó México, siguió como operador activo del régimen para apoyar a las guerrillas salvadoreña y nicaragüense", cuenta el ex agente.
* * * *
Durante su estancia en México, cada movimiento y contacto de Julián López Díaz eran monitoreados por la DFS. Su perfil estaba confeccionado para ser el de un diplomático dedicado a las relaciones públicas. Con ese atuendo, Gutiérrez Barrios registró entre sus amistades a escritores y periodistas, entre los que estaban Alberto Domingo, Raquel Tibol, Francisco Martínez de la Vega, el ex presidente Lázaro Cárdenas, José Pagés Llergo, director de la revista Siempre! , y el español nacionalizado mexicano Víctor Rico Galán, un personaje considerado por sus escritos y críticas al régimen como "la obsesión" del director de la DFS.
Dice el reporte confeccionado por quien después sería senador y gobernador: "López Díaz es el contacto con la agencia noticiosa Prensa Latina , auspiciada por el gobierno cubano, a través de Froylán Manjarrez, Antonio Karam y Edmundo Jardón Arzate. Por su conducto, los diferentes grupos de izquierda mexicanos, obtienen las invitaciones y pasajes para asistir a los diversos festejos o actos que se realizan en La Habana, Cuba. Conserva amistad con los principales periodistas mexicanos de esa ideología.
"El 31 de julio de 1965, Víctor Rico Galán viajó a Mérida, Yuc., acompañado de López Díaz y de José Luis Posada Torres, quien era Cónsul Cubano en Tampico y que se distinguió como activo agente del Servicio de Inteligencia de ese país. El objeto del viaje de Rico Galán era pronunciar un discurso en la capital de ese Estado. López Díaz regresó a México el 3 de agosto y Rico Galán el 5 de ese mes".
Julián López Díaz era el hombre a seguir. Los hombres de Gutiérrez Barrios lo mantendrían cercado. Se trataba de evitar que México sirviera de base de apoyo para otras guerrillas latinoamericanas. Habría que poner en evidencia al régimen de su amigo Fidel Castro. Pero el "capitán caballero" no dudaría.
No hay comentarios:
Publicar un comentario