Lujurioso y adicto a drogas; publican vida privada del exrey saudí
Fahd bin Abdulaziz Al Saud, exrey de Arabia Saudí (1982-2005).
Una nueva película sobre la vida privada de Fahd bin Abdulaziz Al Saud, revela que este exrey saudí era adicto a las drogas y que normalmente disfrutaba de juergas.
Titulado como Los Pecados del Rey Fahd todavía no tiene una fecha exacta de lanzamiento, pero un avance de tres minutos de la película fue publicado el viernes en YouTube.
El clip muestra al rey Fahd inyectándose dogas e involucrado en juegos de azar en un club en Londres, así como imágenes perturbadoras de una mujer que fue obligada a aborto; dice que era la esposa secreta del líder saudí. Además, apunta a Fahd como una persona lujuriosa.
Sabemos que hay un fuerte interés por la historia en los países occidentales y musulmanes (…) Creemos que Fahd (…) tenía un entusiasmo privado y secreto hacia las fiestas y los juegos de azar en Londres y otros lugares”, explica a la fuente Damien McCrystal, consultor de medios de una compañía encargada de producir la película.
La película está basada en la autobiografía de Janan Harb, bajo el título de El rey saudí y yo, que narra la vida de una joven cristiana de origen palestino que huyó de casa cuando era una adolescente y terminó en Arabia Saudí, donde se dice que se casó con el rey Fahd.
Harb de 68 años, que actualmente vive en la capital británica, dice que en 1970 se vio obligada a huir del reino árabe puesto que ella no era querida por la familia real, incluido el actual rey de la monarquía, Salman bin Abdulaziz Al Saud.
La película incluye además algunas escenas del rey Salman, que de acuerdo con Harb, era conocido como el “carnicero de Riad” por su brutal gobernación en esta ciudad capitalina, tal y como recoge este domingo el portal Middle East Eye.
“Sabemos que hay un fuerte interés por la historia en los países occidentales y musulmanes (…) Creemos que Fahd (…) tenía un entusiasmo privado y secreto hacia las fiestas y los juegos de azar en Londres y otros lugares”, explica a la fuente Damien McCrystal, consultor de medios de una compañía encargada de producir esta película.
Arabia Saudí es conocida por ser un país musulmán profundamente conservador, donde el alcohol y los juegos de azar están prohibidos y a las mujeres no les permiten conducir. Las revelaciones de Harb probablemente causarán un gran debate en el reino, donde Fahd fue ampliamente adorado durante su gobierno (1982-2005).
mpv/ktg/rba
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