AI deplora crímenes de guerra israelíes contra nación palestina
Amnistía Internacional (AI) ha denunciado este miércoles “los crímenes de guerra y violaciones de derechos humanos”, cometidos durante el año 2014 por el régimen de Israel contra la nación palestina.
El dossier de AI sobre los derechos humanos en el mundo critica la continuación del férreo bloqueo israelí contra la Franja de Gaza, iniciado en 2007
El dossier de AI sobre los derechos humanos en el mundo critica la continuación del férreo bloqueo israelí contra la Franja de Gaza, iniciado en 2007, y lo considera como “un castigo colectivo a sus 1,8 millones de habitantes”.
Asimismo, ha deplorado la insistencia del régimen de Tel Aviv en continuar con la construcción de “asentamientos ilegales” en los territorios ocupados, así como la construcción de un muro en Cisjordania.
En alusión a la ofensiva de 51 días del régimen de Israel contra Gaza, desarrollado entre los pasados meses de julio y agosto con un saldo de 2310 palestinos muertos y otros 10.626 heridos, AI considera que se trata de “ataques desproporcionados e indiscriminados contra zonas civiles densamente pobladas”.
Luego de mencionar que esos ataques también provocaron el desplazamiento de 110 mil personas, además de dejar “miles de viviendas” destruidas, el informe rememora que la mayoría de los ataques tenían como blanco “escuelas que ofrecían refugio a civiles y contra otros edificios civiles”.
En este sentido, AI documenta ocho casos de ataques israelíes contra viviendas habitadas palestinas, hospitales y “trabajadores de ambulancias que intentaban socorrer a los heridos o rescatar los cadáveres”.
De acuerdo con Anna Neistat, directora general de Investigación de Amnistía Internacional, los dirigentes mundiales deben imponer nuevas restricciones para hacer frente al uso de armas explosivas que no pueden dirigirse con precisión o que tienen efectos sobre amplias zonas en áreas pobladas, como es el caso del régimen de Israel, entre otros, y de esa manera “ayudar a salvar miles de vidas que se perdieron en conflictos recientes”.
Al final, el informe de AI pide a los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) renunciar a su derecho de veto en situaciones de genocidio y otras atrocidades masivas.
“Esto podría suponer un punto de inflexión para la comunidad internacional y los instrumentos de que dispone para ayudar a proteger la vida de los civiles (…) y enviar a los responsables de abusos el firme mensaje de que el mundo no se quedará de brazos cruzados mientras se cometen atrocidades masivas”, afirma Salil Shetty, secretario general de AI.
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