El mandatario de Transnistria, Yevgueni Shevchuk, ordenó poner en alerta máxima las fuerzas de defensa antiaérea de la autoproclamada república.
La decisión es una respuesta a los vuelos no autorizados sobre territorio transnistrio por parte de los aviones rumanos, realizados entre 4 y 27 de abril, informa el ministerio de Defensa de Transnistria, citado por el periódico ruso Vzglyad.
"Debido a las violaciones continuas del espacio aéreo de la RMP —la República Moldava Pridnestroviana, el nombre oficial del territorio— por las aeronaves extranjeras, y con fines de prevenir los vuelos no autorizados, las unidades de defensa antiaérea de la RMP han sido desplegados en sus posiciones de fuego y puestos en alerta máxima", señala el comunicado de Defensa.
Los vuelos en cuestión fueron realizados a instancia de Moldavia, informó Oleg Belyakov, copresidente de la Comisión de Control Conjunta —compuesta de Moldavia, Rusia y Transnistria— al mandatario transnistrio. El avión despegó de la ciudad rumana de Iasi, volando a baja altura llevó a cabo aerofotografías del territorio, incluso de las instalaciones militares, notó el funcionario.
La parte izquierda del río Dniéster convocó a una reunión extraordinaria de la Comisión de Control Conjunta —compuesta de Moldavia, Rusia y Transnistria- durante la que las partes intercambiaron sus opiniones.
Sin embargo, pese a la protesta de Transnistria, Moldavia continuó autorizando dichos vuelos.
Transnistria, cuya población está compuesta por 60 por ciento de rusos y ucranianos, insistió en la separación de Moldavia antes de la desintegración de la Unión Soviética, temiendo que los ánimos nacionalistas empujaran a Chisinau a unirse a Rumanía.
En 1992, al fracasar el intento de las autoridades moldavas de resolver el problema por la fuerza, Transnistria se convirtió en un territorio independiente de facto de Moldavia, a pesar de carecer del reconocimiento de la comunidad internacional.
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