Estudiantes chilenos desafían al gobierno convocando otra marcha para el próximo 28 de agosto
24/08/2012 07:51
Los dirigentes secundarios y universitarios chilenos han convocado otro movimiento estudiantil en el país para el próximo 28 de agosto, en la que mostrarán que sus “convicciones siguen intactas y lo seguirán” mientras no vean “solución a los problemas”.
La conovatoria ha sido realizada por parte del presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (FEUC), Noam Titelman, quién dirige el núcleo de la protesta juvenil en el país junto a otros portavoces, como la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech), la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES) y la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (Cones).
Esta convocatoria se hace justo cuando el número de los detenidos en las manifestaciones del jueves ha llegado a 139 personas, en la capital chilena, Santiago, donde los participantes en la marcha exigieron una educación pública, gratuita y de calidad, un derecho reconocido para cualquier pueblo.
De acuerdo con las estimaciones entregadas por la policía, en las 14 marchas no autorizadas, participaron cerca de 8 mil estudiantes, cifra que contradice las declaraciones del presidente del país, Sebastián Piñera, quién minimizó la protesta juvenil, cuando anunció que “eso es menos del 0,1% de las escuelas”.
"Hay nueve instituciones que están en toma. Eso es menos del 0,1 por ciento. Y si bien escuchamos con mucha atención a ese 0,1 por ciento, con mucha mayor razón escuchamos al 99,9 restante que lo que quiere hacer es estudiar", anunció el mandatario chileno desde el Palacio de La Moneda, sede del Ejecutivo, donde presentó el último Informe de Desarrollo Humano del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
La situación del país respecto al tema de una mejora en la educación se intensifica cada vez más y atrae la atención de organizaciones internacionales; como ejemplo se puede recordar el incidente que ocurrió el miércoles, cuando unos 30 estudiantes chilenos tomaron pacíficamente la sede de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en el capital del país, para pedir el apoyo de este organismo internacional en favor de sus demandas.
Desde el año pasado, los estudiantes han organizado más de 40 marchas por el centro de Santiago y ocuparon más de 200 colegios durante varios meses.
mrk/kt/ab/
La conovatoria ha sido realizada por parte del presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (FEUC), Noam Titelman, quién dirige el núcleo de la protesta juvenil en el país junto a otros portavoces, como la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech), la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES) y la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (Cones).
Esta convocatoria se hace justo cuando el número de los detenidos en las manifestaciones del jueves ha llegado a 139 personas, en la capital chilena, Santiago, donde los participantes en la marcha exigieron una educación pública, gratuita y de calidad, un derecho reconocido para cualquier pueblo.
De acuerdo con las estimaciones entregadas por la policía, en las 14 marchas no autorizadas, participaron cerca de 8 mil estudiantes, cifra que contradice las declaraciones del presidente del país, Sebastián Piñera, quién minimizó la protesta juvenil, cuando anunció que “eso es menos del 0,1% de las escuelas”.
"Hay nueve instituciones que están en toma. Eso es menos del 0,1 por ciento. Y si bien escuchamos con mucha atención a ese 0,1 por ciento, con mucha mayor razón escuchamos al 99,9 restante que lo que quiere hacer es estudiar", anunció el mandatario chileno desde el Palacio de La Moneda, sede del Ejecutivo, donde presentó el último Informe de Desarrollo Humano del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
La situación del país respecto al tema de una mejora en la educación se intensifica cada vez más y atrae la atención de organizaciones internacionales; como ejemplo se puede recordar el incidente que ocurrió el miércoles, cuando unos 30 estudiantes chilenos tomaron pacíficamente la sede de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en el capital del país, para pedir el apoyo de este organismo internacional en favor de sus demandas.
Desde el año pasado, los estudiantes han organizado más de 40 marchas por el centro de Santiago y ocuparon más de 200 colegios durante varios meses.
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