En la película, titulada Larceny, participaron internos del penal El Hongo
Prestan instalaciones de una cárcel de Baja California para filmar cinta sobre el narco
Autoridades aseguran que no hubo pago alguno para permitir el trabajo cinematográfico
Foto
El actor sueco Dolph Lundgren, protagonista de la cinta filmada en el penal bajacaliforniano de El Hongo
Antonio Heras
Corresponsal
Periódico La Jornada
Lunes 25 de enero de 2016,
Tecate, BC
La cárcel de mediana seguridad El Hongo, del sistema penitenciario de Baja California, fue utilizada para grabar una película de narcoviolencia y corrupción, en la cual internos participaron como extras.
Las tomas hechas en El Hongo se filmaron el 23 de octubre pasado. Luces, cámaras, vestuario, maquillaje, técnicos y actores arribaron al Centro de Readaptación Social de El Hongo, complejo penitenciario que alberga a más de 10 mil internos y se distingue por la vigilancia estricta y las altas medidas de seguridad.
Según la Secretaría de Seguridad Pública de Baja California, ese centro es el mejor evaluado entre los penales certificados por el Centro de Correccionales de América, mientras que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos lo ubica en el cuarto sitio de las cárceles mexicanas por su infraestructura, tecnología de punta, espacios de reclusión, centros escolares, canchas deportivas, talleres y naves industriales.
También ha sido locación de películas extranjeras de acción, como complemento del Estudio de Filmaciones de Popotla, que se sitúa en Playas de Rosarito y se utilizó para filmar Titanic (James Cameron, 1997).
Entre quienes filmaron en el penal en octubre anterior figuran el director R. Ellis Frazier y el actor Dolph Lundgren (el ruso Ivan Drago, rival de Rocky Balboa, en la cuarta entrega de la serie de Sylvester Stallone).
La cinta se llama Larceny, y en ella un ladrón profesional es contratado por la CIA (la central de inteligencia estadunidense) para rescatar documentos que se encuentran en una cárcel de máxima seguridad en México.Sin embargo, también en ese complejo penitenciario se almacenan millones de dólares confiscados a un narcotraficante que busca recuperarlos.
La Secretaría de Seguridad Pública del estado informó que representantes de la producción solicitaron el uso de las instalaciones penitenciarias para el filme, y se aprobó prestarlas sin que mediara pago alguno.
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