martes, 29 de marzo de 2011

Reprochan legisladores a Semarnat permiso a regasificadora de Sempra

En un encuentro ríspido, la Comisión Especial que investiga a la empresa dijo a funcionarios federales y representantes de la trasnacional que no habrá marcha atrás en la determinación de cerrar la planta en Ensenada. Roberto Garduño y Enrique Méndez Publicado: 29/03/2011 16:51 México, DF. La Comisión Especial que investiga a la empresa trasnacional Sempra Energy se reunió en privado con funcionarios de la firma y de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales a los que reprocharon haber permitido la instalación irregular de la planta regasificadora Costa Azul en el litoral de Ensenada. Todos los diputados que integran ese órgano reprobaron las violaciones a la ley que se han documentado por parte de la trasnacional y de las autoridades del gobierno de Baja California, entre ellos, el ex gobernador panista Eugenio Elorduy. Los legisladores advirtieron que no habrá marcha atrás en la determinación de cerrar la empresa si se confirman las anomalías que se han detectado y documentado en los últimos tres meses. El encuentro privado –del cual se tiene grabación- fue ríspido y propició el enojo y la frustración de los funcionarios de la trasnacional.

lunes, 28 de marzo de 2011

YO, DUEñO DE PEMEX, PREGUNTO Alberto Nuñez Esteva

Cada pueblo tiene el gobierno que * se merece José de Maistre Gracias, Señor Presidente, por recordarme, con motivo de los recientes festejos del 73 aniversario de la expropiación petrolera, que los dueños de Pemex no son los partidos políticos, ni gobierno alguno, ni es la caja chica de nadie, sino que pertenece a todos los mexicanos, y como yo soy uno de ellos, pregunto a quienes han tenido la responsabilidad del manejo de mi empresa: 1.- ¿Quién responde por la pérdida neta que sufrió Pemex en el 2010 por $47,463 millones? ¿Y por la del 2009, que ascendió $94,882 millones? ¿Y por el patrimonio negativo, sí, negativo de mi empresa, que asciende a $ 113,783 millones (lo que quiere decir que está en quiebra técnica)? 2.- ¿Quién responde por el pasivo a fin del año pasado que ascendía a 121.000 millones de dólares (en pesos ya se hace difícil manejar y entender tantos ceros) incluyendo una reserva para beneficios de los empleados por 53,521 millones de dólares, que se incrementó en 14.7% este último año? ¿Cómo se van a pagar esos beneficios si no han sido fondeados por mi empresa? ¿Estamos conscientes de que este adeudo con los empleados representa más del 5% de PIB nacional? 3.- ¿Quién responde por los rendimientos negativos de operación en el 2010 por $ 155,643 millones en refinación y por $15,362 millones en petroquímica? Es indispensable que el Consejo de Pemex responda con claridad y objetividad ante el reclamo de la ciudadanía acerca de las causas por las cuales pierden tanto dinero nuestras refinerías y nuestras empresas petroquímicas ¿Por qué ellas pierden mientras otras empresas similares en el mundo tienen jugosas utilidades, incluyendo Deer Park en donde Pemex está asociada con capital extranjero en los Estados Unidos? ¿Por qué estamos importando casi 5 de cada 10 litros de los combustibles que se consumen en el país? Estas compras se han disparado del 2000 al 2010 de U$1,298 millones de dólares a $10,535 millones (casi diez veces más, según El Economista, enero del 2011) 4,- ¿Quién responde por la caída en la producción de crudo de 3,256 millones de barriles diarios en 2006 a 2,576 millones en el 2010? 5.- ¿Cómo es posible que en el 2010 el número de tomas clandestinas en ductos de Pemex, mi empresa, se haya elevado a 710 y por ahí se hayan robado 2,162 millones de barriles, que valuados a 80 dólares por barril nos da un importe superior a $2,000 millones de pesos? ¿Quién transporta esta mercancía y cómo lo hace? ¿Quién refina este petróleo? ¿En dónde se vende? ¿Será muy difícil controlar que los productos que salen de una planta de Pemex lleguen al lugar al que están destinados? 6.- En una ponencia que presenté en la Cámara de Senadores el 17 de julio del 2008 destacaba yo lo siguiente: “Al terminar el 2007 se tenían 67,016 jubilados, 113,083 trabajadores sindicalizados y 28,063 empleados de confianza, lo que quiere decir que los jubilados representan el 47% de la fuerza laboral total, o dicho en otros términos, hay un jubilado por cada 2.1 trabajadores en activo. El contrato colectivo de trabajo muestra concesiones al sindicato fuera de toda proporción, derivadas de un desequilibrio histórico en las negociaciones entre patrón y trabajadores. Mientras que en una empresa privada este desequilibrio puede ocasionar la quiebra de la fuente de trabajo, en un organismo público descentralizado, como es Pemex, el costo exagerado de las prestaciones lo absorbemos finalmente los contribuyentes” ¿Qué solución presentan a este problema? Usted, Señor Presidente, señaló enfáticamente en su intervención el pasado 18 de marzo “…deben atenderse los problemas de la paraestatal, principalmente los de sus finanzas, pero sin perjudicar los derechos de los trabajadores” Yo pregunto: ¿Y los intereses de los ciudadanos? Carlos Romero Deschamps , líder del Sindicato Petrolero (¿Cuántos años?) descalificó a los funcionarios de Pemex en la multicitada ceremonia de la expropiación petrolera, a quienes reclamó, “no es aceptable que la profesionalización de los directivos que necesita la industria no coincida con la designación de personas que no cumplen con los perfiles y experiencia requeridos” ( El Universal y Milenio). Coincido con la apreciación del líder sindical, a la luz de los resultados obtenidos. Señor Presidente, usted asevera que yo soy uno de los dueños de Pemex y lo creo, pero mi empresa ha sido saqueada por la Secretaría de Hacienda, al llevarse todas sus utilidades y más, porque carece de los recursos necesarios para atender los requerimientos de la nación. La falta de una reforma fiscal integral es una de las grandes deudas que tienen los legisladores y los hombres en el poder con la ciudadanía. Pemex es su caja chica o ¿grande?, sin considerar el daño que le causan. Los beneficiarios de Pemex, de la empresa en la que todos los mexicanos somos sus accionistas, son la Secretaría de Hacienda y el Sindicato. A mí, supuesto dueño, sólo me queda elevar mi voz –como ya lo he hecho en ocasiones anteriores- una voz en el desierto que se pierde entre la demagogia y el populismo de los repetidos discursos que iluminan la ceremonia anual de la expropiación petrolera. Me da envidia la visión de una empresa como Petrobras, la empresa estatal brasileña que ha entendido el futuro, y no se ha refugiado en un nacionalismo anacrónico, sostenido en nuestro país únicamente por sus beneficiarios. Rechazo la pobre y raquítica reforma energética del 2008, reforma que, a pesar de magníficas aportaciones de expertos que concurrieron al diálogo convocado por el Senado, fue tan pequeña como aquellos diputados y senadores que finalmente la aprobaron. Yo, dueño de Pemex, he hecho seis preguntas. ¿Quién responde? *Presidente de Sociedad en Movimiento ton_nunez@hotmail.com

domingo, 20 de marzo de 2011

El amigo americano




Por Miguel Ángel Castillo Tema del Momento – dom, 20 mar 2011 13:22 CST
MÉXICO, DF, marzo 20 (EL UNIVERSAL).- Era habitual verlo en Los Pinos, en donde a comienzos de los años sesenta Winston Scott solía desayunar los domingos con el presidente Adolfo López Mateos. Fue también cercano a quienes gobernarían el país en los dos sexenios siguientes, Gustavo Díaz Ordaz y Luis Echeverría Álvarez. La relación no sólo era de amistad, pues Scott incorporó a estos y a otros altos funcionarios mexicanos en una nómina de agentes pagados por la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por su siglas en inglés), de una operación conocida como LITEMPO, dedicada sobre todo a monitorear y, a la vez, impedir el avance comunista.

"Sólo los presidentes López Mateos y Díaz Ordaz tenían más poder que Scott", dice en entrevista Jefferson Morley, autor de Nuestro hombre en México, "pero el poder del jefe de la CIA fue por un periodo más extenso".


Para José Luis Piñeyro, experto en temas de seguridad nacional, el personaje Winston Scott "refleja en gran parte la mentalidad anticomunista de la época de la Guerra Fría, y es un ejemplo de cómo los gobiernos mexicanos seguían este doble juego de una política exterior independiente, incluso tercermundista, y por otro lado de colaboración estrecha con Estados Unidos en contra de aquellos movimientos, partidos o sindicatos de orientación comunista, socialista o antisistémica. Se muestra así la doble cara del Estado mexicano".

Otro especialista en temas de seguridad, Raúl Benítez Manaut, pide no exagerar la influencia que pudo tener Scott en los altos círculos del poder. "Minusvaluarlo no es correcto, porque ciertamente tenía poder. Ahora, decir que era el que mangoneaba los hilos del poder en México es una exageración. Las élites políticas en la época del PRI, sobre todo en esta etapa de apogeo, no necesitaban que nadie les anduviera diciendo qué hacer, eran lo suficientemente capaces para controlar el país, como para necesitar consejos de los americanos. Más bien la cercanía de Scott con los presidentes, los secretarios de Gobernación, los jefes de la Dirección Federal de Seguridad o los militares, era para tener información de inteligencia de primera mano y para que México les hiciera ciertos trabajos de inteligencia, en este caso básicamente sobre Cuba y sobre dirigentes latinoamericanos de izquierda que pasaban por México", dice.

"¿Ah, Chihuahua, quién es ese?"

Una anécdota, extraída del libro de Morley, refleja el modo como Winston Scott entendía a México. En el verano de 1968 uno de sus hijastros, Gregory Leddy, choca su auto por la madrugada en Paseo de la Reforma y va a dar a la delegación de policía; al poco tiempo aparece Win en su enorme Mercury negro con placas rojas diplomáticas de las Olimpiadas. Contaría más tarde el propio Gregory: "Los policías mexicanos ven a este hombre y comienzan a pensar en su posición. ¿Ah, Chihuahua, quién es ese? Scottie entrega al primer policía que ve un billete de cien pesos. Da al segundo policía otro billete de cien pesos. Me pregunta si estoy bien. ¿El auto está bien? Digo que estoy bien y que sólo hay que pagarle al jefe. […] Deambuló por la sala, estrechó la mano de todos y a todos les dio un billete de cien pesos. Al jefe le dio como cuatrocientos. Luego miró alrededor y preguntó: '¿Todos contentos?' Ese era Scottie en su mejor momento, el estadounidense que podía hacer cualquier cosa".


Si la influencia de Winston Scott en el poder político mexicano puede calibrarse de modo distinto, según la óptica con que se le mire, sin duda puede decirse que era entonces el verdadero embajador de Estados Unidos.

Dice Morley: "Para nosotros la presencia de Scott significa que el poder de Estados Unidos en México era clandestino y represivo, ayudábamos al monopolio del PRI. Scott murió en el 71, pero el sistema de colaboración que él fundó sobrevivió a las años setenta y después. ¿Cómo deben verlo los mexicanos? No estoy seguro. No soy mexicano. A mí la dependencia, la íntima colaboración y la amistad de presidentes y secretarios me parecen increíbles, es como la relación de Mubarak y la CIA hoy… o ayer".

—Scott registra el paso de Lee Harvey Oswald por México poco antes del asesinato de Kennedy, ¿no es ingenuo pensar que no estuviera informado si se trataba de un agente estadounidense "vestido" de comunista, que es una de las hipótesis del crimen?

—Sabemos de una red en la CIA que conocía bien a este hombre antes del asesinato de JFK(John F. Kennedy). Sabían su nombre, su biografía, sus actividades izquierdistas, sus viajes… Estos hombres de la CIA observaron a Oswald muy de cerca. Scott era miembro de este pequeño grupo, aunque probablemente sabía menos que los otros. ¿Por qué? Los que observaban a Oswald en octubre de 1963 no le dijeron a Scott la historia completa. Su amigo James Angleton, número tres de la CIA, conocía mucho más de Oswald. Así es como trabaja la CIA: secretos entre amigos.

¿Comunistas en Tlatelolco?

Según Nuestro hombre en México, Scott llevó a Washington el cuento de una provocación de la izquierda el 2 de octubre en la Plaza de las Tres Culturas. Apoyaba en esto a Díaz Ordaz, quien afrimaba que el disturbio había sido planeado por grupos comunistas rusos, castristas y chinos. Se lee en el libro: "Cuando Walt Rostow, consejero de seguridad nacional de Johnson, exigió confirmación, las respuestas de Win eran poco convincentes. ¿Acaso los estudiantes mexicanos utilizaban rifles nuevos provenientes de China con los números borrados? Win dijo que no tenía pruebas de esa afirmación. ¿Participaban individuos fuera de México en el movimiento estudiantil? Si bien la prensa mexicana continuamente recalcaba el hecho de la participación extranjera, Win comentó: 'No se ha presentado evidencia concluyente a este efecto'".

Piñeyro explica: "No hay que olvidar que en más de una ocasión la CIA ha realizado reportes de inteligencia falsos. En su libro sobre la agencia, Phillip Agee menciona que en parte su renuncia obedeció a que se le exigía que hiciera reportes alarmistas con respecto al movimiento estudiantil de 1968, y quien estaba atrás era Winston Scott. Se trataba de exagerar la infiltración comunista en el movimiento".

Las enseñanzas del libro son claras para Morley: "Espero que la gente de la CIA y del gobierno de Obama aprendan de este libro la verdadera historia de las Américas. No es una historia de los buenos americanos en una cruzada por la libertad, el mercado libre o cualquier mitología que prefieran aquí en Washington. La verdadera historia habla de clandestinidad y represión contra la democracia. Si no entendemos eso pronto tendremos problemas en México, Centroamérica, Cuba y muchos otros lugares.

..


jueves, 17 de marzo de 2011

Advierten albazo para aprobar reforma laboral del PRI, Muñoz Ledo, Mario Di Constanzo y Laura Itzel Castillo





El albazo que pretende dar el jueves 17 de marzo el PRI con el apoyo de Calderón para acelerar la aprobación de su proyecto de reforma laboral es prueba plena de la alianza entre los dos partidos.

El Congreso, los trabajadores y los ciudadanos no podemos permitir la imposición de una reforma que legalice la precariedad de las condiciones del trabajo e incremente la pobreza. Invitamos a las organizaciones a decretar una huelga nacional en contra de la opresión.

Atentamente

Porfirio Muñoz Ledo

P.D. Adjuntamos el oficio enviado al Presidente de la Mesa Directiva, a los Coordinadores Parlamentarios, al Presidente de la Comisión y al Secretario de Servicios Parlamentarios esta misma tarde.

Palacio Legislativo de San Lázaro, México, Distrito Federal, a 16 de marzo de 2011

DIP. JORGE CARLOS RAMÍREZ MARÍN
Presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados

DIP. FRANCISCO ROJAS GUTIÉRREZ

Coordinador del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional

DIP. JOSEFINA VÁZQUEZ MOTA

Coordinadora del Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional

DIP. ALEJANDRO ENCINAS RODRÍGUEZ

Coordinador del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática

DIP. PEDRO VÁZQUEZ GONZÁLEZ

Coordinador del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo

DIP. PEDRO JIMÉNEZ LEÓN

Coordinador del Grupo Parlamentario del Partido Convergencia

DIP. REYES TAMEZ GUERRA

Coordinador del Grupo Parlamentario del Partido Nueva Alianza

DIP. JUAN JOSÉ GUERRA ABUD

Coordinador del Grupo Parlamentario del Partido Verde

DIP. TERESO MEDINA RAMÍREZ

Presidente de la Comisión de Trabajo y Previsión Social

LIC. EMILIO SUÁREZ LICONA

Secretario de Servicios Parlamentarios de la Cámara de Diputados

PRESENTE

Me dirijo a ustedes con relación a la convocatoria irregular y apresurada a la reunión de la Comisión de Trabajo y Previsión Social. Estoy a punto de salir hacia la Reunión Interparlamentaria en Paraguay y me veo en la necesidad de comunicarles mi preocupación por la falta de respeto a nuestra actividad parlamentaria.

A todas luces, la convocatoria de la Comisión del Trabajo que recibí la noche de ayer, martes 15 de marzo de 2011, en las instalaciones de la Comisión que presido, es contraria no sólo al Reglamento recientemente impuesto en esta Cámara, sino a la ética más elemental y a las reglas de Derecho que aspiramos a implantar en la Cámara.

Las violaciones en cuestión son las siguientes:

No ha sido debidamente publicada en la Gaceta Parlamentaria, lo que es contrario al artículo 155 del Reglamento de la Cámara.
El oficio de la convocatoria no ha sido remitido y rubricado por el Presidente de la Comisión, sino por el Secretario Técnico Lic. Gustavo Macías, lo que viola el artículo 156, numeral 1. fracción VI. Ello es nulo de pleno derecho al emitir la convocatoria una autoridad que carece de competencia.

La convocatoria fue emitida con posterioridad a las 17:00 horas del martes 15 de marzo, es decir, menos de 48 horas antes de las 8:00 horas del jueves 17 de marzo en que se convoca a dicha reunión, lo cual constituye una flagrante violación al artículo 150, fracción II del nuevo reglamento.
No se nos ha remitido el orden del día de la reunión con las especificaciones que dicta el artículo 156, fracción IV de los incisos b) al d), lo que debería ir anexo a la documentación.
Es por ello que me permito recurrir a su autoridad y buenos oficios para impedir este atropello a la normatividad y a la sana convivencia legislativa.

ATENTAMENTE

Dip. Porfirio Muñoz Ledo

——————————————————————————–

Advierten albazo para aprobar reforma laboral del PRI
REDACCIÓN SDPNOTICIAS.COM

Ciudad de México – El diputado federal del PT, Mario Di Costanzo, advirtió que ya se está organizando un albazo para aprobar la iniciativa de reforma laboral del PRI en la Cámara de Diputados.

Por medio de un mensaje en Twitter, Di Costanzo señaló que se está convocando a la comisión del trabajo en San Lázaro a las 8 de la mañana para aprobaro la inciativa priista. “Es un Albazo”, señaló Di Costanzo.

La reforma laboral del PRI ha sido señalada por dañar los derechos de los trabajadores, como reducir a un año el derecho a los sueldos caídos, e implementar un sistema de contratación temporal por un mes.

El PAN avaló y hasta se congratuló por esta reforma del PRI. “Ahí estaremos” dijo al respecto el diputado federal del PT, Gerardo Fernández Noroña, quien se opone a esta iniciativa

miércoles, 2 de marzo de 2011

Sara Salazar, la Foto de la Ira



Jenaro Villamil

No habrá honores oficiales para los 4 hijos, el nieto y la nuera de doña Sara Salazar asesinados en Ciudad Juárez en menos de tres años. Tampoco ninguna palabra de aliento o de condolencia del primer mandatario Felipe Calderón. Mucho menos coberturas especiales en las dos grandes televisoras como lo hacen cuando se trata de armar linchamientos para ganar rating. El PRD ni siquiera se ha dado por enterado que esta familia de activistas insumisos pertenecía al partido que se desgarra por los restos que dejan los Chuchos a su paso.

Sin embargo, a pesar de la indolencia gubernamental y partidista, quedará grabada para siempre la foto de la agencia Reuters tomada durante el funeral del pasado sábado 26 de febrero como símbolo imborrable del dolor, la ira y la indignación que rodean a los juarenses y a la familia Reyes Salazar. Esa imagen sintetiza la tragedia, por un lado, y la resistencia que se han enraizado en Ciudad Juárez.

En esta instantánea que recorrió el mundo, se observa a doña Sara Salazar viuda de Reyes con los brazos extendidos. Tiene los ojos cubiertos por unos lentes oscuros. Su pelo blanco ondea en el aire. Un grito de dolor es ahogado con el trasfondo de un cielo gris, tan gris como el desierto de la frontera. Tres féretros coronan la tragedia de esta familia que en los últimos cinco años perdió a cinco de sus integrantes, pero no ha dejado de denunciar los abusos cometidos durante los operativos militares.

Otras fotos ilustran que más de 500 efectivos militares custodiaron el sepelio, pero ninguno de ellos ayudó a cavar la fosa. ¿A quiénes protegían realmente estos soldados: a la institución involucrada en las denuncias o a la familia que ha resistido todo tipo de amenazas y crímenes, incluyendo el incendio de sus propiedades y la eliminación selectiva, al estilo de una guerra sucia?

Tan sólo Josefina Reyes Salazar, ejecutada el 3 de enero de 2010, documentó 15 casos de detenciones ilegales cometidas por personal de las fuerzas armadas en contra de la población juarense en los últimos dos años. Su hermano Rubén padeció la persecución y el allanamiento de su casa, antes de ser asesinado, y su hijo Julio César Reyes, ultimado en noviembre de 2008, también acompañó en la organización de las denuncias.


El 7 de febrero de este año, en el nuevo gobierno de viejas impunidades encabezado por el priista César Duarte, desaparecieron Malena y Elías Reyes Salazar, al igual que su esposa Luisa Ornelas. En protesta, doña Sara Salazar inició el 9 de febrero una huelga de hambre frente a las instalaciones de la Fiscalía General de Chihuahua, a pesar de su edad avanzada y del agudo deterioro de su salud. Acompañada de su hija Marisela Reyes, quien ha tomado la estafeta del activismo de la familia.

Marisela no se anduvo con eufemismos cuando le informaron que sus parientes habían sido asesinados, al igual que Josefina, Rubén y Julio César: exigió que el gobierno de Calderón “retire las tropas y que termine con esta pinche guerra estúpida que nadie pidió”.

Esas palabras nunca fueron transmitidas en Canal 2 ni en Canal 13. Se ocultaron en las crónicas de los medios impresos, pero reverberaron con una fuerza inusitada en los medios internacionales y en las redes sociales.

Cinco países les han ofrecido asilo a los sobrevivientes de la familia Reyes Salazar: Estados Unidos, Canadá, Francia, España y Venezuela. Doña Sara Salazar analiza irse a España, pero antes continuará el plantón que inició hace casi un mes para denunciar la impunidad, la guerra de odio que se ha desatado contra los activistas en Juárez.

Este sábado 5 de marzo, ellos se convertirán en el eje de una marcha de protesta e indignación que nunca encuentra tranquilidad en Ciudad Juárez, la ciudad más violenta del mundo, el epicentro de los feminicidios impunes dese 1993, el sitio de tránsito entre las drogas, la maquila y las armas, la plaza disputada por los cárteles más violentos que desafían día con día la ineficaz guerra desatada por el gobierno federal y también el sitio desde donde se construyen los expedientes de abusos militares y policiacos que le costarán al calderonismo su pase a la historia de la infamia.

México en problemas: EEUU impondrá una "fuerza de tarea" en su territorio


Por: Zósimo Camacho


El plan de intervención militar de Estados Unidos en México. Durante la más reciente visita de Hillary Clinton a este país, la delegación estadunidense impuso al gobierno de Calderón más elementos de sus agencias de inteligencia y del Pentágono en territorio nacional; además, una “fuerza de tarea” de efectivos estadunidenses que “ayudará” en las zonas más conflictivas, revelan generales y coroneles en activo del ejército mexicano.

Uno de los militares, quien ocupa un alto cargo en la Secretaría de la Defensa Nacional, asegura que México vive ya una “ocupación” llevada a cabo por los organismos de inteligencia de Estados Unidos. Lo que sigue es la intervención militar disfrazada de operativos binacionales

Coches bomba en ciudades mexicanas y declaraciones e “informes” en los que se afirma que el narcotráfico atenta contra la seguridad de todo el continente precedieron la más reciente visita de Hillary Clinton a México.

Vino a imponerle al gobierno de Felipe Calderón más agentes de inteligencia y una “fuerza de tarea” compuesta por efectivos estadunidenses, a decir de un grupo de generales y coroneles en activo del Ejército Mexicano, quienes solicitan “por el momento” que sus nombres no sean revelados por temor a represalias al interior de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

Luego de la visita, las declaraciones de funcionarios estadunidenses acerca de la “peligrosidad” del narcotráfico se multiplicaron y se advirtió que tropas de Estados Unidos podrían cruzar la frontera. El punto más álgido de las demandas ocurrió después del ataque a dos elementos de la Agencia de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) en San Luis Potosí. Uno murió.

Un general de división en activo, que actualmente ocupa un alto cargo en la Sedena, señala que muchos de los actos violentos en territorio nacional son inducidos para que la sociedad mexicana acepte la intervención. La propia Sección Segunda del Ejército, encargada de inteligencia militar, habría encontrado indicios de que la CIA realiza actividades de desestabilización en el país.

Las presiones de la delegación que visitó México el 24 de enero pasado -y que estuvo encabezada por la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton- fueron tan intensas que obligaron a Felipe Calderón a abrir un espacio en su agenda. Los funcionarios estadunidenses sólo se reunirían con la secretaria de Relaciones Exteriores, Patricia Espinosa; pero el mismo día de la visita se anunció que Clinton y su comitiva también serían recibidas en Los Pinos.

“México no puede”, el pretexto

Clinton fue precedida por una serie de declaraciones de funcionarios estadunidenses en las que cuestionaban la solvencia de las instituciones mexicanas para enfrentar la “amenaza” del narcotráfico. El 12 de enero, el presidente del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, almirante Michael G Mullen, había externado su “enorme preocupación” por la capacidad de violencia de los cárteles mexicanos de la droga. En conferencia con la prensa extranjera acreditada en Washington, había dicho que “la severidad del problema” del narcotráfico se mide, “de manera trágica y triste”, por las miles de vidas que se han perdido (en México) en años recientes”, y que suman más de 35 mil.

El principal asesor del presidente de Estados Unidos en materia de seguridad nacional entonces destacó que el gobierno de Barack Obama está interesado en seguir ayudando a la administración de Felipe Calderón. “Queremos hacer todo lo que podamos, reconociendo, tristemente, que esto va a tomar tiempo”.

Incluso, Mullen habló de lo que hasta ahora ha sido la participación de Estados Unidos en la “guerra” contra el narcotráfico: “Por el lado militar, nosotros hemos estado involucrados principalmente en entrenar y dar apoyo. Hay aspectos de esta guerra contra las drogas que son muy similares al tipo de cosas que hemos visto en guerras en las que hemos estado involucrados”.

Una semana después, el 21 de enero, el portavoz del Departamento de Estado, Philip Crowley, declaró, sin ambages, que los cárteles del narcotráfico de México son una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos. En conferencia de prensa, señaló: “No creo que el tema sea si la estabilidad de nuestra sociedad está en riesgo, pero ciertamente es una amenaza a la seguridad nacional”.

Además, describió a las bandas del narcotráfico como fuerzas que pueden desafiar a los Estados: “Estas organizaciones criminales internacionales poseen bienes, armas y personas que pueden ser un reto para cualquier fuerza de seguridad”.

A tres días de la llegada de Clinton a México, el Departamento de Estado mandó un mensaje claro: en la “guerra” que se libra en territorio mexicano, podrán participar otras naciones: “El nivel de violencia que han traído a México y otros sitios (los cárteles de la droga) es un reto que no es exclusivo para México y Estados Unidos. Ciertamente, debe ser parte de un diálogo de seguridad nacional”.

La pinza se cerró un día después: un coche bomba estalló en Tula, Hidalgo. En el lugar, murió el comandante del Grupo Tula de la Coordinación de Investigación de Hidalgo, Víctor Manuel Peña Pérez; quedaron destrozados completamente el carro que contenía el explosivo y un Jetta blanco en el que viajaban los policías. El clima previo a la llegada de Hillary Clinton parecía corroborar las declaraciones de los funcionarios estadunidenses.

La visita

Durante su visita, Clinton aseveró públicamente que México no tiene otra alternativa que seguir con la estrategia de Calderón. Lanzó elogios al “liderazgo” del presidente mexicano y dijo que las Fuerzas Armadas de este país han avanzado en el respeto a los derechos humanos.

Pero no dijo a lo que realmente vino, explican los militares y coroneles que buscaron a Contralínea desde mediados del año pasado para externar el malestar que existe entre un sector del Ejército Mexicano por lo que consideran una sumisión total del gobierno de Felipe Calderón a los intereses de Estados Unidos.

“Clinton vino a imponer más agentes de sus agencias que ya están funcionando en México”, es decir, la ICE, la agencia antidrogas (DEA, por sus siglas en inglés), la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés), la Oficina Federal de Investigación (FBI, por sus siglas en inglés), la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, por sus siglas en inglés) y el Pentágono. “Pero también vino a imponer una ‘fuerza de tarea’ compuesta por efectivos de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos que van a realizar operativos en territorio mexicano”.

A decir del grupo de militares, la “fuerza de tarea” estadunidense trabajaría de manera “conjunta” con las Fuerzas Armadas mexicanas y se desplazarían, como primer objetivo, por las ciudades fronterizas. Luego del “éxito” que obtendrían, se utilizarían en las “zonas más conflictivas” de México.

Estela de declaraciones... y violencia

Dejó Clinton el país, pero el discurso de que México sucumbirá al narcotráfico si no es “ayudado” por Estados Unidos se intensificó. El 27 de enero, el Congreso estadunidense publicó un informe en el que señala que su vecino del Sur se encuentra inmerso en una “crisis de seguridad sin precedentes”, que es posible que sea vencido por lo que llamó “terrorismo doméstico” y que el crimen organizado le disputa a las autoridades el monopolio del uso de la fuerza y de la ley. El informe, elaborado por el Congressional Research Service, también criticó la corrupción generalizada en las instituciones mexicanas.

Pero el 8 de febrero un funcionario de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos dijo abiertamente que tropas de ese país podrían cruzar la frontera con México. Joseph Westphal, subsecretario del Ejército estadunidense, advirtió sobre la posibilidad de que soldados estadunidenses fueran a combatir la “insurgencia” de los cárteles de la droga “sobre nuestra frontera o de tener que enviarlos a cruzar esa frontera”.

Horas más tarde, el funcionario trató de corregir sus declaraciones. Pero el mensaje se había dado. El servidor público estadunidense había dicho también que el narcotráfico podría instalarse en el poder en México si Estados Unidos no hacía algo para impedirlo.

Las presiones sobre México continuaron. Un día después, Janet Napolitano vinculó a Los Zetas con la organización terrorista Al Qaeda. La secretaria del Interior del gobierno de Barack Obama declaró, en una audiencia del Congreso estadunidense, que el grupo que encabeza Osama bin Laden podría usar las redes de los narcotraficantes mexicanos para atacar Estados Unidos. Luego dijo que no hablaría más del tema en una audiencia abierta y que podría hacerlo sólo en sesiones a puerta cerrada.

El 10 de febrero, fue el turno del jefe de la Inteligencia de Estados Unidos, James Clapper. Señaló que la violencia que se produce en México atenta de tal manera contra la seguridad de Estados Unidos que “recientemente hemos elevado todo este tema a la categoría uno, la cual es la más alta”.

Clapper dio al traste con los argumentos de quienes veían imposible una intervención militar en México porque Estados Unidos tenía “otras prioridades”.

Clapper definitivamente descartó que las fuerzas mexicanas puedan controlar el problema del narcotráfico. “Las capacidades militares y policiales [de México] en conjunto permanecen inadecuadas para romper las organizaciones traficantes y contener la violencia criminal”, dijo.

Las presiones públicas y privadas que el gobierno de Estados Unidos ejerce sobre el gobierno de Calderón se han agudizado con el ataque del 15 de febrero a dos “agentes especiales” de la ICE en San Luis Potosí. El policía Jaime Zapata murió. Su compañero Víctor Ávila fue gravemente herido.

La posición oficial de Estados Unidos ante el hecho no se hizo esperar. Janet Napolitano advirtió: “Que no quede duda, cualquier acto de violencia contra el personal de la ICE o de cualquier miembro del Departamento de Seguridad Interna es un ataque contra todos aquéllos que sirven a nuestra nación y ponen en riesgo su vida por nuestra seguridad. La totalidad de los recursos de nuestro departamento está a disposición de nuestros socios mexicanos en esta investigación. Nos mantenemos comprometidos a dar el más amplio apoyo a los esfuerzos de México por combatir la violencia dentro de sus fronteras”.

Un día después, agentes de la FBI ya estaban en San Luis Potosí investigando los hechos. De acuerdo con una nota de María Guadalupe González, publicada en el diario La Jornada el 17 de febrero pasado, a la entidad llegaron funcionarios de alto nivel de la Secretaría de Seguridad Pública federal y la Procuraduría General de la República, “así como un grupo de tarea comandado por la FBI”.

Incluso, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, prometió que su gobierno atraparía a los culpables. El día 16 se comunicó con la familia del agente asesinado para expresarle sus condolencias; pero también les garantizó que su gobierno llevará ante la justicia a los responsables, de acuerdo con Nick Shapiro, vocero de la Casa Blanca.

Los militares reafirman lo declarado a Contralínea el año pasado, publicado en la edición 209 del 21 de noviembre de 2010: existe un plan injerencista llevado a cabo por Estados Unidos y al que se ha sometido el gobierno de Felipe Calderón. Gran parte de la violencia es provocada para que las instituciones castrenses y la sociedad mexicana acepten no sólo que agentes estadunidenses trabajen en México, sino que, incluso, efectivos militares ingresen a “combatir” a los cárteles de la droga.

El grupo de militares y coroneles, entre los que se encuentran algunos adscritos a la Sección Segunda del Ejército (inteligencia), señala que punto por punto se ha cumplido ese plan ante la pasividad de las autoridades mexicanas. Señala que la violencia inducida puede incrementarse para que el país esté en la situación de aceptar la “ayuda” venga de donde venga.

En http://contralinea.info