Venezuela, situado al norte del hemisferio Sur de América, tiene la
suerte de poseer una gran riqueza natural, basada principalmente en sus
grandes reservas de petróleo, gas natural, hierro, oro, bauxita, energía
hidroeléctrica, carbón, hierro, plata, estaño, manganeso, níquel,
mercurio, titanio, mercurio, diamantes, tungsteno, cromo, magnesita,
fosfato, mica, amianto, sal, caolin, uranio y coltan.
La economía venezolana se basa principalmente en el petróleo, en su
territorio están las reservas probadas de hidrocarburos más grandes del
mundo. El país lleva la delantera con el 18% (300.900 millones de
barriles) de crudo sin explotar, seguido por Arabia Saudita (16%) y
Canadá (10%). En cuanto al gas natural existen unos 5.701.000 millones
de metros cúbicos, ubicando al país como el octavo con mayores reservas.
Con esta explicación no es difícil entender el por qué el territorio
venezolano es tan apetecible para Washington y sus administraciones, el
porqué conviene a toda costa derrumbar el sistema humanista y socialista
iniciado por Chávez y que hoy continúa impresionantemente Nicolás
Maduro.
La última jugada fue la de este martes cuando conocimos por el
ministro de Comunicación e Información de Venezuela, Jorge Rodríguez,
que un grupo de militares se ubicaron en el distribuidor Altamira, en el
este de Caracas, para promover un golpe de Estado junto a la
ultraderecha y sacaron en la madrugada (incitados por Juan Guaidó) de su
arresto domiciliario a Leopoldo López, quien había sido condenado a 13
años de cárcel por asociación para delinquir, instigación a delinquir,
intimidación pública, incendio a edificio público, daños a la propiedad
pública, lesiones graves, homicidio y terrorismo.
Se trata de otro golpe fallido, otro acto de desesperación
planificado desde Washington y Bogotá, como todas las fracasadas
acciones inconstitucionales de los últimos meses en territorio
venezolano, fueron las palabras de Jorge Arreaza, el canciller
venezolano.
Por su parte, Delcy Rodríguez, Vicepresidenta Ejecutiva de la
República Bolivariana de Venezuela, expresó en su cuenta de twitter:
“Les cuesta entender que el país con su pueblo resistió otros intentos
de desestabilización y vencerá este nuevo golpe de un grupo minúsculo de
traidores.
“De forma descarada e inmoral el gobierno EEUU reconoce su autoría en
este criminal intento de golpe de Estado en Venezuela! Muestran ante el
mundo sus ansias por destruir nuestra Patria. El Pueblo venezolano
seguirá derrotando las agresiones imperiales en paz. Que viva
Venezuela”, señaló.
Y los cubanos que sabemos de amenazas, presiones y de resistencia
nos preguntamos ¿Cuándo el imperio se convencerá que ni con todo su
poder de coerción, ni con todo su control mediático, ni con todo su
bloqueo y guerra económica (que han provocado la pérdida 132 mil
millones de dólares) han logrado derrotar al pueblo venezolano? ¿Qué más
necesitan probar?
Deberían estudiar la historia de Venezuela, si lo hicieran
comprenderían que los traidores y fascistas nunca torcerán el destino de
libertad que tiene marcado el país suramericano. Como apuntó la
presidenta ejecutiva, "la democracia bolivariana está fundada en el
protagonismo del pueblo, que descansa a en la gloria de sus
Libertadores, de Chávez".
Así lo confirman las declaraciones de la gente de pueblo, que ha
recogido TeleSur desde la movilización popular en Miraflores,
respaldando a su presidente legítimo y su "derecho a la soberanía e
independencia, a pesar de la injerencia repetida del pájaro loco de
Trump" y de todas las formas de Terrorismo de Estado que ha usado para
derrocar la Revolución bolivariana.
El pueblo venezolano que hoy ha salido a defender su
constitucionalidad también exige ser respaldado por las instituciones
que tienen la obligación de llevar a un proceso judicial a los traidores
como Leopoldo López y Juan Guaidó. No basta con que el Tribunal supremo
del país rechace el intento de golpe de Estado perpetrado por un
pequeño grupo de militares y dirigentes de la extrema derecha opositora,
hay que defender la democracia juzgando a los culpables, ahí están
todas las pruebas y las investigaciones realizadas desde enero de 2019.