La explotación de
cobre y litio desata
una "guerra del agua"
en el desierto de Chile
Publicado: 30 ago 2018 19:31 GMT
El Gobierno chileno hace esfuerzos por regular las concesiones de agua otorgadas en los últimos años y establecer un mecanismo para garantizar las reservas hídricas.
La sobreexplotación de las cuencas hidrográficas por parte de las compañías mineras en Chile mantiene en alerta al gobierno de ese país, que busca establecer una regulación para garantizar el acceso al agua.
En entrevista a Reuters, el regulador hídrico chileno, Óscar Cristi, explica que muchos acuíferos están siendo utilizados a más de su capacidad en el norte del país por las compañías mineras, debido a la riqueza del suelo. Sin embargo, su objetivo es establecer una normativa para "decretar áreas prohibidas".
"El estado ha sido muy reacio a establecer prohibiciones sobre la extracción de agua", dijo Cristi, quien propone cambiar esa realidad y "adoptar un enfoque mucho más diligente al decretar áreas prohibidas".
¿A las puertas de la regulación?
Según el funcionario, las licencias de explotación del agua fueron entregadas de manera indiscriminada durante décadas sin considerar el impacto que podrían tener a futuro, lo que ahora genera un problema para la preservación de los recursos hídricos disponibles en el desierto de Atacama, considerado el más árido del mundo.
Aunque todavía no se ha cuantificado la cantidad de recursos hídricos que hay en la zona, se estima que son menos que la cantidad de permisos otorgados para la explotación. El Gobierno, sin embargo, hasta ahora ha sido cauto ante la posibilidad de restringir el acceso al agua por una razón: la economía del país depende de la extracción del cobre.
El lobby de las empresas mineras, así como la dependencia de la actividad extractiva, han enfriado las iniciativas legislativas que han planteado poner orden en el sector, como la revisión del código hídrico, que ha permanecido engastado en el Congreso desde 2014.
Sin más permisos
El establecimiento de una prohibición a nuevos permisos para explotar agua en un acuífero clave del Salar de Atacama es una señal de que los cambios se avecinan. Por eso, los diversos actores de la industria minera tienen sus ojos puestos en Cristi, quien ha prometido un giro a la política de regulación.
Esa restricción se promulgó en un acuífero que suministra agua a Escondida, de la empresa BHP Billiton, la mina de cobre más grande del mundo. El próximo paso, afirmó el ente regulador, será decretar una reserva de agua potable en el salar, donde operan los principales productores de litio a escala planetaria: SQM y Albemarle.
El as bajo la manga para este paso es una enmienda al código hídrico, que le permite al Estado obligar a los usuarios a reducir la extracción de acuíferos saturados. No obstante, tanto SQM como Albemarle aseguran que tienen todos los derechos sobre los recursos hídricos, y que no esperan que la restricción afecte sus niveles de producción actual o futura.
Litio contra el agua
El cuello de botella para preservar los recursos hídricos es la creciente demanda de litio. Se estima que Chile posee el 50% de las reservas mundiales de ese mineral, por lo que una restricción podría afectar los niveles de producción del llamado "oro blanco", altamente demandado para la industria de autos eléctricos, computadoras portátiles y teléfonos móviles.
Recientemente, SQM y Albemarle firmaron un acuerdo para aumentar drásticamente sus cuotas de extracción con la misma o menos agua en el Salar de Atacama: "Lo que tenemos es una guerra del agua en la salina. Hay un gran enamoramiento en el agua", consideró Alonso Barros, un abogado de la Fundación del Desierto de Atacama consultado por Reuters.
Por otro lado, la profesora de estudios de salinas en la Universidad de Antofagasta, Ingrid Garcés, considera que hay un desconocimiento de cómo se mueve el agua a través del salar e interactúa con la salmuera rica en litio.
Como resultado, advierte Cristi, la autoridad del agua carece de jurisdicción porque la salmuera tiene un componente de agua, pero en Chile se le considera como un mineral, por lo que se rige bajo los mismos parámetros del cobre o el hierro.
"No sabemos cuál es el impacto de la extracción de salmuera en la disponibilidad de agua en Salar", advierte el funcionario. "Así que sí, podría haber un desequilibrio que no estamos considerando".
No hay comentarios:
Publicar un comentario