El nuevo oro: cómo hacer una fortuna de los desechos
Uno de los vertederos más grandes de Europa podría convertirse en un productor de materiales de construcción y energía. Al menos esa es la iniciativa que ha impulsado la compañía Group Machiels en el recolector de basura Remo, a 100 kilómetros de Bruselas (Bélgica).
En ese vertedero están enterrados 18 millones de toneladas de residuos que podrían ser utilizados como combustible para las plantas de gasificación por plasma. Lo que no pueda ser utilizado en la producción eléctrica sería incinerado y utilizado como materia prima para la producción de materiales de construcción.
Según cálculos de la compañía, tan solo el gas obtenido del vertedero de Remo podría ser suficiente para alimentar con energía eléctrica a 200.000 hogares durante las próximas dos décadas.
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