‘Fuertes evidencias’ confirman genocidio de musulmanes en Myanmar
Rohingyas huyen de la persecución religiosa en barcos manejados por traficantes de persona.
De acuerdo con un nuevo informe, existen “fuerte evidencias” de que el Gobierno de Myanmar (Birmania) ha cometido genocidio contra los musulmanes rohingyas.
El informe difundido el lunes por la Unidad de Investigación de la cadena catarí Al-Jazeera se basa en la indagación realizada por la Clínica Lowenstein de la Facultad de Derecho de Yale, en EE.UU.
“Consideradas la magnitud de las atrocidades y la forma que los políticos tratan a los rohingyas, llegamos a la conclusión de que el genocidio contra los rohingyas había sido planeado con anterioridad”, indica la Clínica.
El Ejecutivo de Myanmar, a través de la provocación de disturbios contra los musulmanes, la utilización de discursos de odio sobre estos mismos para suscitar miedo entre el pueblo de Myanmar, y el ofrecimiento de dinero a los grupos budistas de línea dura para que respalden al Gobierno del país asiático, intenta obtener beneficios políticos, según una evidencia exclusiva obtenida a través de la misma investigación.
A medida que se acercan las elecciones generales birmanas previstas para el próximo 8 de noviembre, los documentos revelados por Al-Jazeera, indican que el gobernante Partido para la Solidaridad y el Desarrollo de la Unión (USDP, por sus siglas en inglés), intenta marginar a los musulmanes rohingya, según las fuentes.
Desde el año 2012, los rohingyas que viven en Myanmar son blanco de constantes ataques de budistas extremistas, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) considera, de hecho, que es la minoría “más oprimida” del mundo.
La desesperación de los rohingyas es consecuencia de décadas de persecución y discriminación en Myanmar, donde se les niega de hecho la ciudadanía en aplicación de la legislación nacional, por estas razones recientemente las Organizaciones musulmanas de EE.UU. presentaron una denuncia por genocidio contra el presidente de Myanmar, Thein Sein, y su gabinete por crímenes contra la minoría Rohingya.
Por su parte, Amnistía Internacional (AI) en un nuevo informe criticó el pasado 21 de octubre, que los malos tratos físicos que sufrían los rohingyas al huir de la persecución en Myanmar vía marítima son casi demasiado terribles para describirlos con palabras.
La ONU expresó su preocupación en marzo de 2015 por las difíciles condiciones en que sobrevive la minoría musulmana rohingya en los campos de refugiados en Myanmar.
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