jueves, 23 de julio de 2015









  • El general estadounidense Mark Milley, en su comparecencia ante el Comité de Servicios Armados del Senado de EE.UU., 21 de julio de 2015.


El general estadounidense Mark Milley ha señalado que la capacidad militar nuclear de Rusia hace del país euroasiático el único que podría destruir a los Estados Unidos.
“Rusia es el único país del mundo que contiene una capacidad nuclear que podría destruir los Estados Unidos”, dijo Milley el martes en Washington, en una comparecencia ante el Comité de Servicios Armados del Senado estadounidense.
Milley, que defendía su candidatura a suceder a Raymond T. Odierno como jefe de Estado Mayor del Ejército de EE.UU., identificó también como amenazas para la seguridad de su país a Corea del Norte, Irán, China y a la banda terrorista takfirí EIIL (Daesh, en árabe).
“Cada uno a su manera, representan amenazas, amenazas a la seguridad de Estados Unidos”, declaró ante los legisladores.
Misil intercontinental nuclear RT-2PM Topol sobre una plataforma móvil de lanzamiento, en un desfile en Moscú, 4 de mayo de 2011.

Pero frente a otros focos de preocupación, resaltó el ruso: “es una amenaza existencial para los EE.UU., de modo que tiene capacidad; resolución (de atacar), no lo sé; pero la actividad de Rusia desde 2008 ha sido muy, muy agresiva”, dijo Milley.
El alto mando militar defendió que Washington proporcione armamento letal a Ucrania: “el equipo letal, creo yo, es algo que deberíamos considerar, y yo estaría a favor de una dotación letal defensiva”, precisó el general estadounidense.
Las relaciones entre Rusia y EE.UU. se deterioraron drásticamente en febrero 2014 con el derrocamiento, por revueltas espoleadas por Washington, del presidente electo ucraniano Víktor Yanukóvich.
La secretaria de Estado adjunta estadounidense para asuntos europeos y euroasiáticos, Victoria Nuland (centro), junto al embajador de Washington en Kiev, Geoffrey R. Pyatt, entre opositores ucranianos al Gobierno del presidente Víktor Yanukóvich (2010-2014) durante la revuelta del Maidán.

EE.UU. y sus aliados acusan a Moscú de enviar tropas al este de Ucrania para apoyar a las fuerzas independentistas sublevadas contra la instauración de dirigentes proccidentales, pese a que Moscú siempre ha rechazado categóricamente toda implicación en la crisis ucraniana.
El Kremlin, por su parte, responsabiliza a Washington, con su expansionismo militar a través de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), del incremento de las tensiones en el este de Europa y de la guerra en Ucrania.
El 9 de julio, el comandante del Cuerpo de Infantería de Marina estadounidense, Joseph Dunford, identificó también a Rusia como “máxima amenaza” para la seguridad del país norteamericano.
mla/ncl/rba

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