Cada vez hay más mujeres entre los peshmerga que participan en las operaciones de las Fuerzas Armadas de Irak para liberar la ciudad de Mosul de los terroristas de Daesh.
Estas mujeres están luchando contra Daesh cerca de la ciudad de Dohuk en el Kurdistán iraní.
Hesibe Azad de 34 años de edad, comandante del batallón de mujeres, explicó a Sputnik por qué esta lucha es la prioridad en su vida.
“En ese entonces estaba viviendo en Estambul. Cuando me enteré de que los combatientes de Daesh atacaron Sinjar y otras ciudades kurdas y me di cuenta de todas las atrocidades a las que estaba siendo sometido mi pueblo, me quedé de piedra. Enseguida sentí el deseo de volver a casa y luchar por mi país, pero mi marido no quiso ir a Kurdistán. Él prefirió ir a Alemania, y yo regresé a casa”, explicó Hesibe.
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Peshmerga
“En 2015 llegué y tomé las armas para luchar contra Daesh. Participé en los combates en Serekaniye, en Sinjar, así como en otros frentes. ‘La fuerza del fuego’ es el nombre de mi subdivisión”, contó la comandante del batallón femenino.
Ahora estas mujeres están luchando contra Daesh cerca de Mosul. Son treinta personas y provienen de diferentes países. Según Hesib Azad, el número de mujeres que se lanzan a la lucha contra los yihadistas va creciendo día a día.
“Las mujeres debemos ser fuertes para luchar contra Daesh y otros grupos terroristas. En muchos lugares los hombres no pueden registrar a las mujeres, que provocan sospechas. Y nosotras podemos hacerlo, y también podemos conducir interrogatorios”.
“Vamos a limpiar el territorio kurdo del sucio Daesh y vengarnos por el pueblo de Sinjar y todo el pueblo kurdo que sufrió por culpa de los terroristas. Estamos dispuestas a llegar hasta el final en nombre de la defensa de nuestra dignidad y la libertad de nuestro pueblo. Esta es nuestra lucha común. Vamos a proteger a todas las mujeres y todo nuestro pueblo", destacó Azad.
Las mujeres peshmerga no tienen ninguna piedad con los terroristas de Daesh. Son muy valientes y están dispuestas a sacrificarse. Perdieron a muchas compañeras, pero se sienten orgullosas de las que murieron, porque son heroínas que dieron sus vidas en la lucha contra el mal. A pesar de estas pérdidas, Hesib Azad dice que las combatientes no tienen miedo de Daesh.
"Todo al revés: los yihadistas tienen miedo de las mujeres peshmerga. Tienen miedo de perder la vida a mano de una mujer, porque piensan que al morir de esa manera, pasarán al infierno. Precisamente por eso nos tienen miedo", concluyó la comandante.
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