Víctor Ballinas y Andrea Becerril
Periódico La Jornada
Viernes 10 de febrero de 2012, p. 32
El gobernador del Banco de México (BdeM), Agustín Carstens, se reunió ayer en el Senado con la fracción del PAN y les pidió aprobar el incremento a la cuota de México al Fondo Monetario Internacional (FMI) para quedar en 8 mil 912.7 millones de derechos especiales de giro (DEG), equivalentes a 14 mil 37 millones 700 mil dólares.
Actualmente el país paga al FMI una cuota de 3 mil 635.7 millones de DEG, y se propone que aporte una cantidad adicional de 5 mil 287 millones de DEG. De aprobarse la solicitud que hizo el Ejecutivo a la Cámara de Senadores desde el 14 de diciembre pasado, el 25 por ciento del incremento de la cuota se pagará en DEG o moneda libre, y el 75 por ciento restante en moneda nacional.
El senador panista y presidente de la Comisión de Hacienda, José Isabel Trejo, detalló que el gobernador del Banco de México les informó que “no se utilizarán recursos fiscales para cubrir el aumento de la cuota al FMI; es decir, la Secretaría de Hacienda no aporta nada; se hará uso de la reserva del BdeM, pero siguen siendo del banco aunque entren a la bolsa del FMI”.
No alcanza para ayudar a Europa
Trejo abundó que el gobernador del BdeM les refirió que “el FMI no ajusta con los recursos que tiene para que en determinado momento enfrente una quiebra, o un colapso financiero europeo”.
Al término del encuentro de la fracción panista con Carstens, Trejo señaló que senadores del blanquiazul cuestionaron al gobernador del BdeM la posición de que países en vías de desarrollo estén subsidiando a las economías desarrolladas, como son la mayoría de las economías de Europa y de Estados Unidos.
Carstens, de acuerdo con Trejo, explicó que “el FMI está principalmente para ayudar a los países que están en problemas, pero no solamente, sino países como México que pudieran en determinado momento tener un impacto del colapso financiero internacional.
“Es como una cooperativa de aportaciones de todos los países, más de 190, y no es para subsidiar a países desarrollados a costa de las aportaciones de los países subdesarrollados, como el caso de México que está en vías de desarrollo, y es uno de los tres países, de los más de 190, que está teniendo un trato preferencial de un crédito de 75 mil millones de dólares sin condicionamientos”.
Carstens dijo “que la crisis de Europa es realmente fuerte, si los europeos no alcanzan a encontrar una solución, por supuesto que nos afectará, no estamos exentos”.
Periódico La Jornada
Viernes 10 de febrero de 2012, p. 32
El gobernador del Banco de México (BdeM), Agustín Carstens, se reunió ayer en el Senado con la fracción del PAN y les pidió aprobar el incremento a la cuota de México al Fondo Monetario Internacional (FMI) para quedar en 8 mil 912.7 millones de derechos especiales de giro (DEG), equivalentes a 14 mil 37 millones 700 mil dólares.
Actualmente el país paga al FMI una cuota de 3 mil 635.7 millones de DEG, y se propone que aporte una cantidad adicional de 5 mil 287 millones de DEG. De aprobarse la solicitud que hizo el Ejecutivo a la Cámara de Senadores desde el 14 de diciembre pasado, el 25 por ciento del incremento de la cuota se pagará en DEG o moneda libre, y el 75 por ciento restante en moneda nacional.
El senador panista y presidente de la Comisión de Hacienda, José Isabel Trejo, detalló que el gobernador del Banco de México les informó que “no se utilizarán recursos fiscales para cubrir el aumento de la cuota al FMI; es decir, la Secretaría de Hacienda no aporta nada; se hará uso de la reserva del BdeM, pero siguen siendo del banco aunque entren a la bolsa del FMI”.
No alcanza para ayudar a Europa
Trejo abundó que el gobernador del BdeM les refirió que “el FMI no ajusta con los recursos que tiene para que en determinado momento enfrente una quiebra, o un colapso financiero europeo”.
Al término del encuentro de la fracción panista con Carstens, Trejo señaló que senadores del blanquiazul cuestionaron al gobernador del BdeM la posición de que países en vías de desarrollo estén subsidiando a las economías desarrolladas, como son la mayoría de las economías de Europa y de Estados Unidos.
Carstens, de acuerdo con Trejo, explicó que “el FMI está principalmente para ayudar a los países que están en problemas, pero no solamente, sino países como México que pudieran en determinado momento tener un impacto del colapso financiero internacional.
“Es como una cooperativa de aportaciones de todos los países, más de 190, y no es para subsidiar a países desarrollados a costa de las aportaciones de los países subdesarrollados, como el caso de México que está en vías de desarrollo, y es uno de los tres países, de los más de 190, que está teniendo un trato preferencial de un crédito de 75 mil millones de dólares sin condicionamientos”.
Carstens dijo “que la crisis de Europa es realmente fuerte, si los europeos no alcanzan a encontrar una solución, por supuesto que nos afectará, no estamos exentos”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario