→ La Jornada de Veracruz/ Fernando Inés Carmona/ 10 febrero 2012/
► Los países de Latinoamérica son los que mayor grado de desigualdad económica registran en el mundo. México tan sólo está detrás de Haití en materia de distribución de riqueza y de los ingresos económicos per cápita. Además, se considera que la economía mexicana no logra salir de la crisis económica que inició en 2008. Esto “es una muestra clara que en México vivimos en un Estado fallido”.
► Los países de Latinoamérica son los que mayor grado de desigualdad económica registran en el mundo. México tan sólo está detrás de Haití en materia de distribución de riqueza y de los ingresos económicos per cápita. Además, se considera que la economía mexicana no logra salir de la crisis económica que inició en 2008. Esto “es una muestra clara que en México vivimos en un Estado fallido”.
► De acuerdo con el investigador de la UNAM, Carlos Arteaga Basurto, el problema de la distribución de la riqueza “es el principal problema que se tiene en los países que conforman el continente americano”. Los recientes análisis indican que México, junto con Brasil, son los únicos países del continente que no logran salir de la crisis económica que se generó en 2008.
●Las estadísticas indican que los problemas de distribución de la riqueza nacional hace que México se encuentre tan sólo por debajo de Haití en materia de distribución equitativa.
“Datos estadísticos dicen que 10 por ciento de la población mexicana goza de 85 por ciento de la riqueza nacional, mientras que 90 por ciento de los mexicanos se distribuye 15 por ciento restante, es decir, hay una gran inequidad en la distribución de la riqueza que se produce en México”.
Ahora este problema puede agravarse aún más debido a que el proceso comicial de este año “sólo traerá promesas electorales que sumadas a las condiciones de sequía que se tienen en otros estados agravan las condiciones de pobreza en la que vive la mayoría de los mexicanos”.
Pero en esto, apunta, hay un responsable: “el gobierno federal no quiere aceptar que es un Estado fallido, porque cuando la pobreza no se abate, cuando crecen los problemas sociales, crece el hambre y ese escenario arroja datos más ilustrativos que los discursos”.
“Basta más que salir a la calle y darse una vuelta y podremos ver lo que vive el país, el campo mexicano es más ilustrativo”.
Otra de las características del Estado fallido la vemos en la inseguridad, “el problema es mayor, por ello es necesario que la población participe y exija su derecho para que definan las cuestiones de carácter público, pero si no se percatan de la importancia que esto tiene será difícil que se avance en el país”.
Sin embargo, “los partidos políticos y los gobiernos de los tres niveles no lo van a permitir porque no tendrían ese control que han poseído siempre”.
De paso plantea que hasta el momento ninguno de los tres precandidatos presidenciales, “ha presentado un plan de trabajo, la gente se preocupa más por la apariencia, si lee o no, pero no sabemos sobre su proyecto político, ya sabemos el discurso de los partidos”.
“Lo que el país demanda es que los candidatos y sus partidos se ocupen y preocupen realmente por este país, no sólo la búsqueda del poder”, concluye.
●Las estadísticas indican que los problemas de distribución de la riqueza nacional hace que México se encuentre tan sólo por debajo de Haití en materia de distribución equitativa.
“Datos estadísticos dicen que 10 por ciento de la población mexicana goza de 85 por ciento de la riqueza nacional, mientras que 90 por ciento de los mexicanos se distribuye 15 por ciento restante, es decir, hay una gran inequidad en la distribución de la riqueza que se produce en México”.
Ahora este problema puede agravarse aún más debido a que el proceso comicial de este año “sólo traerá promesas electorales que sumadas a las condiciones de sequía que se tienen en otros estados agravan las condiciones de pobreza en la que vive la mayoría de los mexicanos”.
Pero en esto, apunta, hay un responsable: “el gobierno federal no quiere aceptar que es un Estado fallido, porque cuando la pobreza no se abate, cuando crecen los problemas sociales, crece el hambre y ese escenario arroja datos más ilustrativos que los discursos”.
“Basta más que salir a la calle y darse una vuelta y podremos ver lo que vive el país, el campo mexicano es más ilustrativo”.
Otra de las características del Estado fallido la vemos en la inseguridad, “el problema es mayor, por ello es necesario que la población participe y exija su derecho para que definan las cuestiones de carácter público, pero si no se percatan de la importancia que esto tiene será difícil que se avance en el país”.
Sin embargo, “los partidos políticos y los gobiernos de los tres niveles no lo van a permitir porque no tendrían ese control que han poseído siempre”.
De paso plantea que hasta el momento ninguno de los tres precandidatos presidenciales, “ha presentado un plan de trabajo, la gente se preocupa más por la apariencia, si lee o no, pero no sabemos sobre su proyecto político, ya sabemos el discurso de los partidos”.
“Lo que el país demanda es que los candidatos y sus partidos se ocupen y preocupen realmente por este país, no sólo la búsqueda del poder”, concluye.
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