En
la sociedad argentina no solo existe una polarización política, sino
también una marcada grieta social que a veces muestra sus peores
facetas. Por ejemplo, en episodios como la quema de dos personas en
situación de calle, un lamentable hecho que fue filmado por sus autores y
viralizado posteriormente.
El
hecho ocurrió hace unas semanas, pero solo adquirió notoriedad en los
medios en las últimas horas: de un auto marca Volkswagen se bajaron unos
hombres. Rociaron de combustible a los hombres que dormían cubiertos
con mantas debajo de un viaducto en la avenida General Paz, el anillo
perimetral que oficia de frontera entre la ciudad de Buenos Aires y su
periferia.
Enseguida, los prendieron fuego. Mientras tanto, uno del grupo filmaba el episodio, en el que se puede escuchar lenguaje soez e inequívocamente discriminatorio hacia los dos sintecho, a quienes los agresores definen como "rastreros" (en dialecto rioplatense, ladrón).
Uno de los dos quemados logró llegar por sus propios medios a pedir ayuda a un hospital, donde permaneció ingresado por quemaduras durante unos días. Del otro, no se sabe nada. Tampoco se ha identificado a los autores del ataque, ni se ha podido establecer si hay un móvil detrás del acto o si fue premeditado.
La
Policía de la ciudad de Buenos Aires actuó cuando el vídeo se comenzó a
difundir, pero no encontró rastros de ninguna de las dos partes. Ahora,
la Fiscalía comenzó una investigación de oficio.
Según el portal Infobae,
un comerciante de la zona indica que no es la primera vez que se da una
escena del estilo, ya que en otras ocasiones ha habido casos de
indigentes quemados. Sin embargo, desde el triste episodio no se han
visto más personas bajo el precario refugio.
Enseguida, los prendieron fuego. Mientras tanto, uno del grupo filmaba el episodio, en el que se puede escuchar lenguaje soez e inequívocamente discriminatorio hacia los dos sintecho, a quienes los agresores definen como "rastreros" (en dialecto rioplatense, ladrón).
Uno de los dos quemados logró llegar por sus propios medios a pedir ayuda a un hospital, donde permaneció ingresado por quemaduras durante unos días. Del otro, no se sabe nada. Tampoco se ha identificado a los autores del ataque, ni se ha podido establecer si hay un móvil detrás del acto o si fue premeditado.
©
Sputnik / Eliana Gilet
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