¿Por qué se acercan los árabes e Israel?
Cada
día se evidencia más que nunca la normalización de lazos entre el
régimen israelí y los países árabes, encabezados por Arabia Saudí. Algo
que en la política de la región de Oriente Medio se consideraba como un
Tabú.
En este sentido, el primer ministro israelí, Benyamin
Netanyahu, anunció que está intentando formar una alianza contra Irán
junto con países árabes ribereños del Golfo Pérsico.
“Los
buenos tratan de unirse a Israel de una nueva manera, formando una
alianza efectiva para contrarrestar la agresión de Irán”, lo afirmó
Netanyahu en una entrevista en el Instituto de Chatham House, en Londres
(capital británica), a lo que ha añadido que los países árabes ven a
Israel como un “aliado” para hacer frente a las “ambiciones de Irán”.
En este artículo pretendemos estudiar el antecedente de la relación
entre el mundo árabe y el régimen israelí, además de analizar el porqué
de la cercanía de ellos.
Raíces de la tensión árabe-israelí
La causa palestina constituyó el principal motivo de la tensión entre
los países árabes y el régimen israelí. De hecho, desde 1948 cuando
venció el mandato británico de Palestina, ellos se han visto
involucrados en un profundo caos, al punto de que los primeros,
encabezados por Siria y Egipto, declararon la guerra al régimen de
Israel en varias oportunidades, pero 4 de ellas fueron las más
destacadas; 1948, 1956, 1967 y 1973. En estas guerras, se oponían a su
establecimiento en los territorios ocupados de Palestina.
No obstante, en todas estas contiendas, los árabes fueron los
perdedores, dejando tal sentimiento de rencor entre los pueblos árabes
que ninguno de ellos reconocían al régimen de Israel como Estado e
incluso pretendían su eliminación.
Después de 1973, en varias ocasiones, hubo enfrentamientos a menor
escala entre palestinos y otros países árabes con el régimen israelí,
pero ninguno funcionó y ahora transcurridas varias décadas de aquel
entonces, se ven señalas de mejoría entre ellos.
Irán, el enemigo común
En estas circunstancias, en Oriente Medio, se registró un
acontecimiento trascendental; el cambio de régimen en Irán y el
establecimiento de una República Islámica con el derrocamiento del rey
Pahlavi, principal socio de EE.UU. e Israel en la región. El nuevo
sistema gobernante en el país persa impulsaba la ideología chií y
pretendía su extensión. Una realidad amarga para Arabia Saudí que
mantenía el wahabismo y veía cómo el nuevo orden impulsado por Irán
contradecía sus intereses en la región, a causa del número de seguidores
que, día a día, iban ganando en países como Irak, El Líbano, entre
otros.
De esta forma, aquellos países como Israel y Arabia Saudí, que
consideraban el nuevo sistema iraní como peligroso para su idolología y
existencia, empezaron acercarse entre sí. El régimen de Al Saud,
encabezado en la década de los ochenta por el entonces monarca Fahd bin
Abdulaziz, anunció un plan de paz para dejar a un lado la negación de la
existencia de Israel.
Israel y los árabes se acercan
Si bien, los países reaccionarios árabes, antes colaboraban en
secreto para normalizar lazos con Tel Aviv, ahora no temen para nada
hacerlo de forma pública. Esto no se limita a las monarquías del Golfo
Pérsico, sino según lo confesado por el expresidente israelí Shimon
Peres, son 22 países árabes los que intentan establecer lazos con Tel
Aviv.
El primer país árabe interesado en establecer lazos con los israelíes
fue Arabia Saudí. De acuerdo con los documentos filtrados por Wikileaks
sobre la normalización de relaciones entre Riad y Tel Aviv, el proceso
del acercamiento entre estos dos se remonta a mediados de la década de
los 90 cuando la monarquía saudí sacó a varias compañías israelíes de su
lista de sanciones. Este proceso se fortaleció en 2002 cuando Riad
propuso un "plan de paz" sobre la causa palestina y en 2005 los saudíes
levantaron más sanciones a israelíes. Sin embargo, el punto inminente en
los lazos entre estos dos, fue el reciente viaje en secreto del príncipe saudí, Mohamad Bin Salman, a los territorios ocupados de Palestina donde se reunió con varias autoridades israelíes.
En este sentido, hay que señalar que cuando Mohamad Bin Salman
derrocó a Mohamad Bin Nayef, el pasado junio, y le sustituyó, EEUU lo
confirmó de inmediato y esto pone de relieve que existe un acuerdo
secreto político entre Bin Salman y Donald Trump. Es posible que la Casa
Blanca haya condicionado el apoyo al nuevo y joven príncipe heredero
saudí a reconocer al régimen saudí.
Egipto es otro país árabe que pese a la prolongada tensión con el
régimen israelí mantiene buenos lazos con Tel Aviv. Estos dos, desde que
El Cairo reconoció la existencia del régimen de Tel Aviv y firmó los
Acuerdos de Camp David, establecieron relaciones muy íntimas. De hecho,
el expresidente egipcio, Anwar Sadat, firmando el acuerdo que fue
conocido como el acuerdo de paz entre Egipto e Israel, sembró la semilla
de la normalización de lazos con Tel Aviv.
De 2013 a 2017, se estrechan aún más los lazos árabe-israelíes
En este contexto, hay que añadir que a partir de 2013, (cuando
estaban en marcha las negociaciones nucleares entre Irán y el Grupo 5+1 y
el creciente caos en Siria e Irak), que se considera como el inicio de
una nueva era para el aumento de la influencia de Teherán en Oriente
Medio, los países árabes encabezados por Egipto y Arabia Saudí
decidieron estrechar aún más sus lazos con Tel Aviv. Incluso, según el exsecretario de Estado de EEUU, John Kerry, ellos habían pedido a Washington que bombardeara Irán y que no firmara un acuerdo nuclear con Teherán.
Es de mencionar que luego de la firma del acuerdo entre Irán y el
Grupo 5+1 que supuso una nueva era para las relaciones internacionales
del país persa, además del fracaso de Riad y sus aliados en derrocar a
los gobiernos en Siria e Irak mediante terroristas de Daesh, que también
fue una victoria para Teherán, la influencia y el poderío iraní se
sintieron más que nunca en la región. Razón por la cual, en los últimos
meses de 2017 las autoridades israelíes están haciendo público su plan
de unión con los árabes.
En este sentido, el ministro de asuntos militares de Israel, Avigdor
Lieberman, aseguró el pasado 19 de noviembre: “Hoy, Oriente Medio
necesita más que cualquier otra cosa una coalición de estados moderados
contra Irán”.
Con todo lo expuesto, se puede decir que el régimen israelí,
aprovechando a Irán como una excusa, espera poder normalizar e incluso
formar una alianza con los países árabes durante la presidencia de
Donald Trump y el mandato del joven príncipe heredero saudí para poder
materializar su anhelo de ser reconocido en el mundo árabe después de 70
años. Sin embargo, no se debe olvidar que lo que está acelerando
últimamente este proceso, se debe también en gran medida a la nueva
estrategia de EEUU hacia Irán, es decir, unir al mundo árabe con Israel
frente al país persa para frenar su influencia en la región de Oriente
Medio, tal como lo aseguró el secretario de Estado de EEUU, Rex
Tillerson.
No hay comentarios:
Publicar un comentario