Milagro Sala estuvo 594 días en la cárcel de Alto Comedero y un mes en prisión domiciliaria. | Foto: Reuters
Publicado 29 septiembre 2017
La
legisladora del Parlasur deberá regresar este viernes a la cárcel. La
defensa informó que emitirá un comunicado sobre esta decisión de la
Cámara de Apelaciones de Jujuy.
La Cámara de
Apelaciones de Jujuy revocó la prisión domiciliaria de la líder de Tupac
Amaru, Milagro Sala, quien había sido trasladada a su casa en el barrio
La Ciénaga, en la ciudad de El Carmen, el pasado 31 de agosto.
La legisladora del Parlasur deberá regresar este viernes a la Unidad Penal de Mujeres de Alto Comedero.
Sala recibió la prisión domiciliaria luego del reclamo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que consideró arbitraria la prisión.
La casa donde estaba la líder indígena estaba custodiada por un puesto especial de la Gendarmería, cámaras de seguridad, una muralla y policías de la provincia. Además, ella tenía una tobillera electrónica. El gran despliegue de seguridad sorprendió a los argentinos, puesto que los genocidas de la dictadura no contaron con operativos de control cuando obtuvieron prisión domiciliaria.
Sala fue detenida el 16 de enero de 2016 por orden del juez Raúl Gutiérrez por un acampe contra el gobernador Gerardo Morales. El 29 de enero se resolvió liberarla por la causa inicial, pero el juez solicitó mantenerla detenida bajo otro cargo: el supuesto desvío de fondos públicos en la construcción de viviendas sociales.
La líder indígena, hasta ahora, solo ha sido condenada a tres años de prisión en suspenso por el escrache en 2009 a Gerardo Morales y a pagar una multa de 3.780 pesos por encabezar el acampe. Sala estuvo 594 días en la cárcel de Alto Comedero y un mes en prisión domiciliaria.
La legisladora del Parlasur deberá regresar este viernes a la Unidad Penal de Mujeres de Alto Comedero.
Sala recibió la prisión domiciliaria luego del reclamo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que consideró arbitraria la prisión.
La casa donde estaba la líder indígena estaba custodiada por un puesto especial de la Gendarmería, cámaras de seguridad, una muralla y policías de la provincia. Además, ella tenía una tobillera electrónica. El gran despliegue de seguridad sorprendió a los argentinos, puesto que los genocidas de la dictadura no contaron con operativos de control cuando obtuvieron prisión domiciliaria.
Sala fue detenida el 16 de enero de 2016 por orden del juez Raúl Gutiérrez por un acampe contra el gobernador Gerardo Morales. El 29 de enero se resolvió liberarla por la causa inicial, pero el juez solicitó mantenerla detenida bajo otro cargo: el supuesto desvío de fondos públicos en la construcción de viviendas sociales.
La líder indígena, hasta ahora, solo ha sido condenada a tres años de prisión en suspenso por el escrache en 2009 a Gerardo Morales y a pagar una multa de 3.780 pesos por encabezar el acampe. Sala estuvo 594 días en la cárcel de Alto Comedero y un mes en prisión domiciliaria.
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