Quieren interrogar al presidente sobre algunos dichos que podrían ir contra la imparcialidad
Defensa de Manning solicita el testimonio de Obama y Clinton
El soldado, acusado de filtrar documentos a Wikileaks; el día 16 verán si le forman consejo de guerra
Manifestación en favor de la liberación del soldado estadunidense Bradley Manning frente a la catedral de San Pablo, en Londres, durante el servicio religioso celebrado el pasado 24 de noviembre por el Día de Acción de GraciasFoto Reuters
David Brooks
Corresponsal
Periódico La Jornada
Martes 6 de diciembre de 2011, p. 29
Nueva York, 5 de diciembre. Bradley Manning, acusado de la mayor filtración de documentos oficiales en la historia, difundidos por Wikileaks, ha solicitado formalmente la presencia y declaración del presidente Barack Obama y de la secretaria de Estado Hillary Clinton ante el tribunal militar que evaluará si se debe proceder con el caso judicial de seguridad nacional de mayor perfil en los últimos años.
David Coombs, del equipo de defensa legal de Manning, presentó la solicitud el viernes en un documento de 20 páginas que incluye una larga lista de testigos de la defensa en una audiencia ante un tribunal militar que evaluará si el caso amerita un juicio ante un consejo de guerra, reportó primero Politico y después el Washington Post. La audiencia está programada para el 16 de diciembre en el fuerte Meade, en Maryland.
Aunque los nombres de Obama y Clinton fueron ocultados en la solicitud que el abogado defensor subió a su sitio de Internet, sus identidades son obvias por las explicaciones que justifican la relevancia de sus declaraciones en el caso. Los abogados defensores afirman que comentarios de Obama sobre el caso de Manning durante un acto de recaudación de fondos electorales en San Francisco, en abril, representan “influencia ilegal de mando”, ya que el presidente, quien también es el comandante en jefe de las fuerzas armadas, afirmó que Manning era culpable de violar la ley al filtrar los documentos diplomáticos y militares. La defensa argumenta que según la ley militar, “un oficial superior en la cadena de mando tiene prohibido decir o hacer algo que pueda influir en la decisión de un subordinado sobre cómo manejar un asunto de justicia militar”.
Coombs afirma que desea interrogar a Obama sobre sus discusiones con oficiales de las fuerzas armadas en torno a este caso y si ha hecho otras declaraciones que pudieran influir en la fiscalización del caso o anular un proceso imparcial para Manning. La defensa también desea preguntar a Obama sobre la falta de impacto adverso para Estados Unidos por la difusión de los documentos militares a través de Wikileaks.
La solicitud del testimonio de Clinton no acusa a la secretaria de Estado de comportamiento inapropiado; sólo busca confirmar su declaración de que que el impacto de la divulgación de los documentos diplomáticos por Wikileaks fue “mínimo”, y que “no representaron consecuencias significativas para la política exterior”. (Copia de la solicitud formal se puede consultar en el sitio de Politico).
El abogado defensor también solicita las “evaluaciones de daños” elaboradas por el Pentágono y el Departamento de Estado que afirman que la información filtrada, en gran medida, fueron “opiniones de bajo nivel”, o era ya conocida por divulgaciones públicas anteriores a la de Wikileaks.
Manning, quien está acusado de la filtración de cientos de miles de documentos militares y cables diplomáticos cuando trabajaba de analista de inteligencia militar en Irak, enfrenta más de 24 cargos, que van de la violación a la Ley de Espionaje hasta asistir al enemigo. Si es declarado culpable, podría ser sentenciado a cadena perpetua.
El soldado ha permanecido en detención militar más de 18 meses, inicialmente en condiciones tan extremas que provocaron denuncias internacionales, incluso del relator especial sobre Tortura de la Organización de Naciones Unidas, Juan Méndez, quien ha criticado al gobierno de Obama por rehusar su solicitud de una entrevista en privado con Manning.
De hecho, Méndez criticó nuevamente esta semana al gobierno de Obama al indicar que cuando investigaba si Manning había sido mantenido en confinamiento solitario, en condiciones que podrían llegar a ser calificadas de tortura, se le negó una reunión en privado y confidencial con el acusado. Afirmó que aún busca esa reunión, pero que ya acabó el intercambio de información con el gobierno estadunidense y espera emitir sus conclusiones sobre el caso en las próximas semanas.
Hace una semana, más de 60 integrantes del Parlamento Europeo enviaron una carta a Obama y a su gobierno expresando su preocupación por el trato a Manning y solicitando que coopere con el relator sobre tortura de la ONU en la investigación de lo que podrían ser graves violaciones de derechos humanos en este caso.
Anteriormente, cientos de expertos legales estadunidenses habían firmado una carta abierta al gobierno de Obama en la cual indicaban que las condiciones de encarcelamiento de Manning podrían haber constituido tortura.
Agrupaciones de defensores de Manning han convocado a una vigilia y después a una marcha y un mitin frente a las instalaciones de fuerte Meade, los días 16 y 17 de diciembre.
(Para información y actualizaciones de este caso y sobre Wikileaks, ver: La Jornada Wikileaks)
Defensa de Manning solicita el testimonio de Obama y Clinton
El soldado, acusado de filtrar documentos a Wikileaks; el día 16 verán si le forman consejo de guerra
Manifestación en favor de la liberación del soldado estadunidense Bradley Manning frente a la catedral de San Pablo, en Londres, durante el servicio religioso celebrado el pasado 24 de noviembre por el Día de Acción de GraciasFoto Reuters
David Brooks
Corresponsal
Periódico La Jornada
Martes 6 de diciembre de 2011, p. 29
Nueva York, 5 de diciembre. Bradley Manning, acusado de la mayor filtración de documentos oficiales en la historia, difundidos por Wikileaks, ha solicitado formalmente la presencia y declaración del presidente Barack Obama y de la secretaria de Estado Hillary Clinton ante el tribunal militar que evaluará si se debe proceder con el caso judicial de seguridad nacional de mayor perfil en los últimos años.
David Coombs, del equipo de defensa legal de Manning, presentó la solicitud el viernes en un documento de 20 páginas que incluye una larga lista de testigos de la defensa en una audiencia ante un tribunal militar que evaluará si el caso amerita un juicio ante un consejo de guerra, reportó primero Politico y después el Washington Post. La audiencia está programada para el 16 de diciembre en el fuerte Meade, en Maryland.
Aunque los nombres de Obama y Clinton fueron ocultados en la solicitud que el abogado defensor subió a su sitio de Internet, sus identidades son obvias por las explicaciones que justifican la relevancia de sus declaraciones en el caso. Los abogados defensores afirman que comentarios de Obama sobre el caso de Manning durante un acto de recaudación de fondos electorales en San Francisco, en abril, representan “influencia ilegal de mando”, ya que el presidente, quien también es el comandante en jefe de las fuerzas armadas, afirmó que Manning era culpable de violar la ley al filtrar los documentos diplomáticos y militares. La defensa argumenta que según la ley militar, “un oficial superior en la cadena de mando tiene prohibido decir o hacer algo que pueda influir en la decisión de un subordinado sobre cómo manejar un asunto de justicia militar”.
Coombs afirma que desea interrogar a Obama sobre sus discusiones con oficiales de las fuerzas armadas en torno a este caso y si ha hecho otras declaraciones que pudieran influir en la fiscalización del caso o anular un proceso imparcial para Manning. La defensa también desea preguntar a Obama sobre la falta de impacto adverso para Estados Unidos por la difusión de los documentos militares a través de Wikileaks.
La solicitud del testimonio de Clinton no acusa a la secretaria de Estado de comportamiento inapropiado; sólo busca confirmar su declaración de que que el impacto de la divulgación de los documentos diplomáticos por Wikileaks fue “mínimo”, y que “no representaron consecuencias significativas para la política exterior”. (Copia de la solicitud formal se puede consultar en el sitio de Politico).
El abogado defensor también solicita las “evaluaciones de daños” elaboradas por el Pentágono y el Departamento de Estado que afirman que la información filtrada, en gran medida, fueron “opiniones de bajo nivel”, o era ya conocida por divulgaciones públicas anteriores a la de Wikileaks.
Manning, quien está acusado de la filtración de cientos de miles de documentos militares y cables diplomáticos cuando trabajaba de analista de inteligencia militar en Irak, enfrenta más de 24 cargos, que van de la violación a la Ley de Espionaje hasta asistir al enemigo. Si es declarado culpable, podría ser sentenciado a cadena perpetua.
El soldado ha permanecido en detención militar más de 18 meses, inicialmente en condiciones tan extremas que provocaron denuncias internacionales, incluso del relator especial sobre Tortura de la Organización de Naciones Unidas, Juan Méndez, quien ha criticado al gobierno de Obama por rehusar su solicitud de una entrevista en privado con Manning.
De hecho, Méndez criticó nuevamente esta semana al gobierno de Obama al indicar que cuando investigaba si Manning había sido mantenido en confinamiento solitario, en condiciones que podrían llegar a ser calificadas de tortura, se le negó una reunión en privado y confidencial con el acusado. Afirmó que aún busca esa reunión, pero que ya acabó el intercambio de información con el gobierno estadunidense y espera emitir sus conclusiones sobre el caso en las próximas semanas.
Hace una semana, más de 60 integrantes del Parlamento Europeo enviaron una carta a Obama y a su gobierno expresando su preocupación por el trato a Manning y solicitando que coopere con el relator sobre tortura de la ONU en la investigación de lo que podrían ser graves violaciones de derechos humanos en este caso.
Anteriormente, cientos de expertos legales estadunidenses habían firmado una carta abierta al gobierno de Obama en la cual indicaban que las condiciones de encarcelamiento de Manning podrían haber constituido tortura.
Agrupaciones de defensores de Manning han convocado a una vigilia y después a una marcha y un mitin frente a las instalaciones de fuerte Meade, los días 16 y 17 de diciembre.
(Para información y actualizaciones de este caso y sobre Wikileaks, ver: La Jornada Wikileaks)
No hay comentarios:
Publicar un comentario